El presidente electo Donald Trump ha nombrado en su administración al Senador republicano por Alabama, Jeff Sessions, como Fiscal general de los Estados Unidos. Él será el principal funcionario del gobierno estadounidense para las tareas relativas a la aplicación del derecho y la defensa de las leyes de la nación. Las personas seculares y liberales están preocupadas por las opiniones que Sessions ha expresado acerca de la separación entre la Iglesia y el Estado. Ellos creen que es posible que la religión comience a restringir la agenda secular, la cual se impuso en los Estados Unidos, especialmente durante la administración Obama. No obstante, el pueblo de Dios también debe sentirse preocupado por una razón diferente.
El Senador Sessions no manifiesta respeto hacia el principio constitucional de la separación entre la Iglesia y el Estado, al cual ha denominado una “doctrina extra-constitucional” y un “asunto reciente que carece de historia y constitucionalidad”. Aparentemente, él piensa sobre el muro de separación como lo hacía el Jefe de la Corte Suprema de Justicia, William Rehnquist, quien dijo una vez: “El muro de separación entre la Iglesia y el Estado es una metáfora basada en una historia equivocada. Se ha comprobado que es una metáfora inútil al usarla como guía para juzgar. Por lo tanto, debe ser franca y explícitamente abandonada”.
Sessions también criticó a la jueza Sotomayor por sus audiencias de confirmación y dijo que sus conceptos eran “posmodernistas y relativistas, propios de una mente secular y directamente contrarios a los fundamentos de nuestra república”. En otras palabras, Sessions es un defensor del escrutinio religioso para un cargo público. La jueza Sotomayor es católica. Si bien ella tiene una mente secular, el tema en cuestión es ¿qué es lo que quiere Sessions para la república?
En otra ocasión, el Senador Sessions dijo: “En los Estados Unidos estamos en un período de secularización, lo cual pienso que es muy peligroso. Esto carcome cada concepto de verdad, el mismo concepto de lo bueno y lo malo, y hay gente allá afuera que disfruta atacar a las personas que siguen directrices bíblicas”.
Aunque esto es verdad, ¿cómo quiere Sessions que sean los Estados Unidos? ¿Hará que pasen de un extremo al otro para dar inicio a la eliminación de la separación entre la Iglesia y el Estado? Esa separación fue la que hizo grande a los Estados Unidos. No parece que él vaya a traer de regreso el equilibrio a las leyes de la nación.
La separación entre la Iglesia y el Estado son el fundamento de toda libertad religiosa. Sin embargo, Donald Trump ha dicho que él va a trabajar para remover la “enmienda Johnson” en el código del IRS y por consiguiente, quitar la “muralla de separación”, otorgando mayor poder a las iglesias. Si alguien pensó que cuando Donald Trump se dirigiera hacia la Casa Blanca, iba a suavizar su determinación de fortalecer el compromiso político de las iglesias, necesita replantear tal idea. Muy posiblemente, la nominación de Sessions puede sugerir que vamos a ver un cambio que vaya desde la secularización hacia el extremo opuesto en el cual los principios modernos de los evangélicos y los católicos determinen la política de los Estados Unidos.
Sessions también es un defensor de la supervigilancia y un enemigo de la encriptación. Estos temas involucran libertades constitucionales que han sufrido bastante erosión durante las dos últimas administraciones (Republicana y Demócrata) en los Estados Unidos. Sessions también ha votado a favor de los planes de vouchers (un vale o cupón) que podría hacer que el dinero de los contribuyentes sea canalizado hacia las escuelas religiosas privadas. Esto nos da un indicio importante de lo vendrá.
Si Ud. cree que la administración de Donald Trump protegerá la libertad religiosa para las religiones minoritarias, piénselo nuevamente. Va a ser todo lo opuesto. Si no hay respeto por la separación entre la Iglesia y el Estado, ¿a dónde llegarán los Estados Unidos proféticamente?
“Los dignatarios de la iglesia y del estado se unirán para hacer que todos honren el domingo, y para ello apelarán al cohecho, a la persuasión o a la fuerza. La falta de autoridad divina se suplirá con ordenanzas abrumadoras. La corrupción política está destruyendo el amor a la justicia y el respeto a la verdad; y hasta en los Estados Unidos de la libre América, se verá a los representantes del pueblo y a los legisladores tratar de asegurarse el favor público doblegándose a las exigencias populares por una ley que imponga la observancia del domingo. La libertad de conciencia que tantos sacrificios ha costado no será ya respetada”. El Conflicto de los Siglos, pág. 650.
Comments
frank achila
02 de diciembre de 2016 at 09:37 09Fri, 02 Dec 2016 09:37:21 +000021.Im appaled.This Sunday law is soon becoming a reality.
NR
04 de diciembre de 2016 at 23:40 11Sun, 04 Dec 2016 23:40:13 +000013.There is nothing to fear if we are growing in Jesus Christ and working hard to spread the Gospel while we still have the freedom to do so. We will not get to go home until all the prophecy is fulfilled so these signs of the times must serve as inspiration for the church to accomplish what it is supposed to and like John the Baptist, prepare for the coming of Jesus. Let us not be in fear at these things but rejoice, because soon Christ will descend in the clouds with glory!
James Duncan
02 de enero de 2017 at 22:05 10Mon, 02 Jan 2017 22:05:01 +000001.Time is fast coming to an end and this is further proof of that. Events are starting to accelerate. Who knows what is to happen next though
John Devine
12 de enero de 2017 at 12:09 12Thu, 12 Jan 2017 12:09:03 +000003.Christians have a 2000 year history of torture and murder. Christians tortured and killed 15,000 people in Europe during the Spanish Inquisition.
Christians killed tens of thousands of people in the Philippines and South America.
Christians killed millions of Native American Indians.
The only people on the planet who think Christians are nice caring, honest people are Christians. Everybody else thinks they are nasty, hypocritical busibodies.