¿Sabía que su teléfono celular puede ser confiscado en un aeropuerto por la Protección Fronteriza y su información ser descargada en las computadoras de seguridad? Pues así es. El Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos [CBP por su sigla en inglés] puede acceder a cualquier información de su teléfono, todas las conversaciones, actividad en cualquier aplicación, su Facebook, o Twitter, cualquier cosa que haya dicho a otra persona, etc. Y sin necesidad de tener una orden de registro.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos está inspeccionando los teléfonos y otros dispositivos digitales de los viajeros internacionales en los puestos fronterizos. Aunque las búsquedas digitales se quintuplicaron en el último año de la administración Obama, es menos de un centésimo del 1% de todas las llegadas internacionales.
Los grupos de vigilancia han notado un aumento en el número de quejas sobre las inspecciones de dispositivos digitales por parte de los agentes fronterizos. Esto se ha vuelto especialmente notorio bajo el mandato del nuevo presidente, dijo Adam Schwartz, un abogado de alto rango de la Fundación Frontera Electrónica. «Nos preocupa que una mala práctica que ha existido bajo anteriores presidentes, ahora empeore con el nuevo presidente», dijo Schwartz.
La CBP tiene su propia explicación diciendo que nada ha cambiado. Pero eso no es verdad. Ella quiere extraer toda la información que se puede almacenar en teléfonos y otros dispositivos por sus propias razones.
Los estadounidenses están protegidos bajo la Cuarta Enmienda contra las búsquedas e incautación sin justificación. Por ejemplo, un policía debe obtener una orden judicial de un juez antes de buscar en el teléfono de un sospechoso. Pero la frontera de Estados Unidos es una zona gris legal, dijo Nathan Wessler, abogado de la ACLU. Desde hace mucho tiempo, los agentes fronterizos tienen el derecho de buscar el equipaje físico de los viajeros sin una orden judicial, y esa interpretación se ha ampliado para incluir los dispositivos digitales. Esto crea enormes cuestiones constitucionales, dijo Wessler.
En el 2016, bajo la administración de Obama, hubo 23.877 inspecciones de dispositivos electrónicos. Eso equivale al 0.0061 por ciento del total de personas que llegan a los EE.UU. En el año fiscal de 2015, hubo solo 4.764 inspecciones de medios electrónicos.
Si bien es cierto que el CBP descubre algunos crímenes de esta manera, un sistema aleatorio de búsquedas se torna en una forma de invasión de la privacidad y no es algo que la mayoría de la gente espera. Se supone que los agentes de la CBP deben tener una causa razonable de sospecha.
A los ciudadanos estadounidenses no se les puede prohibir la entrada por negarse a proporcionar la contraseña de su teléfono pero pueden ser detenidos temporalmente y ser confiscados sus teléfonos por días. A los viajeros que no son ciudadanos de los Estados Unidos se les puede negar la entrada.
Las búsquedas de datos en los aeropuertos profundiza el estado de vigilancia que se ha apoderado de los países occidentales. Constituye una violación de la Constitución de los Estados Unidos la cual garantiza a sus ciudadanos el derecho a la intimidad y a la injustificada búsqueda y captura de los dispositivos digitales. Todos los principios de la Constitución de los Estados Unidos serán rechazados. Ver Testimonios para la Iglesia, vol. 5, página 426.
Comments
Daniel Parsons
26 de febrero de 2017 at 13:14 01Sun, 26 Feb 2017 13:14:36 +000036.I travel frequently and have not had this issue yet. I have been screened further when entering Canada. Whether that was random selection or not, I do not know. Come soon Lord Jesus !