AP News, por Aamer Madhani, Colleen Long, Zeke Miller, Matthew Lee y Ellen Knickmeyer: El presidente Joe Biden ha autorizado a Ucrania a utilizar misiles suministrados por Estados Unidos para atacar a mayor profundidad dentro de Rusia, suavizando las limitaciones sobre las armas de mayor alcance mientras Rusia despliega miles de tropas norcoreanas para reforzar su guerra, según un funcionario estadounidense y otras tres personas familiarizadas con el asunto.
La decisión que permite a Kiev utilizar el Sistema de Misiles Tácticos del Ejército, o ATACM, para ataques más al interior de Rusia se produce mientras el Presidente Vladimir Putin posiciona tropas norcoreanas a lo largo de la frontera norte de Ucrania para tratar de recuperar cientos de kilómetros de territorio tomado por las fuerzas ucranianas.
La medida de Biden también se produce tras la victoria en las elecciones presidenciales de Donald Trump, que ha dicho que pondría fin rápidamente a la guerra y ha generado incertidumbre sobre si su administración mantendría el vital apoyo militar de Estados Unidos a Ucrania.
El funcionario y los otros conocedores del asunto no estaban autorizados a discutir públicamente la decisión de Estados Unidos y hablaron bajo condición de anonimato.
La reacción del presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, el domingo fue notablemente comedida.
«Los ataques no se hacen con palabras», dijo durante su discurso nocturno por vídeo. «Estas cosas no se anuncian. Los misiles hablarán por sí mismos».
Zelenskyy y muchos de sus partidarios occidentales llevan meses presionando a Biden para que permita a Ucrania atacar objetivos militares más al interior de Rusia con misiles suministrados por Occidente, afirmando que la prohibición estadounidense ha hecho imposible que Ucrania intente detener los ataques rusos contra sus ciudades y redes eléctricas.
Las declaraciones de Zelenskyy se produjeron poco después de publicar un mensaje de condolencia en Telegram tras el ataque ruso contra un edificio de nueve plantas en el que murieron al menos ocho personas en la ciudad septentrional de Sumy, a 40 kilómetros de la frontera con Rusia.
Rusia también lanzó un ataque masivo con drones y misiles, descrito por las autoridades como el mayor de los últimos meses, dirigido contra infraestructuras energéticas y en el que murieron civiles. El ataque se produjo mientras aumentan los temores sobre las intenciones de Moscú de devastar la capacidad de generación de energía de Ucrania antes del invierno.
«Y esta es la respuesta a todos los que intentaron conseguir algo con Putin mediante conversaciones, llamadas telefónicas, abrazos y apaciguamiento», dijo Zelenskyy.
El comentario parecía una indirecta al canciller alemán, Olaf Scholz, que habló el viernes con Putin en la primera llamada de este tipo con un jefe en ejercicio de una gran potencia occidental en casi dos años.
Algunos partidarios han argumentado que la limitación y otras restricciones estadounidenses podrían costarle la guerra a Ucrania. El debate se ha convertido en una fuente de desacuerdo entre los aliados de Ucrania en la OTAN.
Biden se había mantenido en contra, decidido a mantener la línea contra cualquier escalada que, en su opinión, pudiera arrastrar a Estados Unidos y a otros miembros de la OTAN a un conflicto directo con la Rusia nuclear.
Putin ha advertido de que Moscú podría proporcionar armas de largo alcance a otros para atacar objetivos occidentales si los aliados de la OTAN permiten a Ucrania utilizar sus armas para atacar territorio ruso.
La noticia de la decisión de Biden se produjo tras las reuniones de los dos últimos días con los líderes de Corea del Sur, Japón y China. La incorporación de tropas norcoreanas fue el tema central de las conversaciones, que tuvieron lugar al margen de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico celebrada en Perú.
Biden no mencionó la decisión durante un discurso en una parada en la selva amazónica de Brasil de camino a la cumbre del Grupo de los 20.
Preguntado por la decisión, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo a los periodistas que la posición de la ONU es «evitar un deterioro permanente de la guerra en Ucrania».
«Queremos la paz, queremos una paz justa», dijo Guterres el domingo antes de la cumbre en Río de Janeiro. No dio más detalles.
Es probable que los misiles de mayor alcance se utilicen en respuesta a la decisión de Corea del Norte de apoyar la invasión de Ucrania por Putin, según una de las personas familiarizadas con el desarrollo.
El suministro global de misiles ATACMS es escaso, por lo que los funcionarios estadounidenses se han preguntado en el pasado si podrían dar a Ucrania suficientes como para marcar la diferencia. Algunos partidarios de Ucrania afirman que incluso unos pocos ataques en el interior de Rusia obligarían a su ejército a cambiar los despliegues y a gastar más recursos.
Corea del Norte ha proporcionado miles de tropas a Rusia para ayudar a Moscú a intentar recuperar tierras en la región fronteriza de Kursk que Ucrania tomó este año. La introducción de tropas norcoreanas en el conflicto se produce cuando Moscú ha visto un cambio de impulso favorable. Trump ha señalado que podría presionar a Ucrania para que acceda a ceder parte de los terrenos arrebatados por Rusia para poner fin al conflicto.
Hasta 12.000 soldados norcoreanos han sido enviados a Rusia, según evaluaciones estadounidenses, surcoreanas y ucranianas. Los servicios de inteligencia estadounidenses y surcoreanos afirman que Corea del Norte también ha suministrado a Rusia cantidades significativas de municiones para reponer sus menguantes arsenales.
Trump, que asumirá el cargo en enero, habló durante meses como candidato sobre su deseo de que la guerra de Rusia en Ucrania termine, pero la mayoría de las veces eludió las preguntas sobre si quería que Ucrania, aliada de Estados Unidos, ganara.
También criticó repetidamente a la administración Biden por conceder a Kiev decenas de miles de millones de dólares en ayudas. Su victoria hace temer a los partidarios internacionales de Ucrania que cualquier acuerdo precipitado beneficie sobre todo a Putin.
Estados Unidos es el aliado más valioso de Ucrania en la guerra, con más de 56.200 millones de dólares en ayuda a la seguridad desde que las fuerzas rusas invadieron el país en febrero de 2022.
Preocupada por la respuesta de Rusia, sin embargo, la administración Biden ha retrasado repetidamente el suministro de algunas armas avanzadas específicas solicitadas por Ucrania, accediendo sólo bajo la presión de Kiev, sus partidarios y en consulta con los aliados.
Por ejemplo, en un principio rechazó las peticiones de Zelenskyy de tanques avanzados, sistemas de defensa antiaérea Patriot y cazas F-16, entre otros sistemas.
La Casa Blanca accedió en mayo a permitir a Ucrania el uso de armamento proporcionado por Estados Unidos para ataques limitados al otro lado de la frontera con Rusia.
Nuestro comentario:
¿Está intentando el presidente Biden iniciar la Tercera Guerra Mundial antes de dejar el cargo?
Conexión Profética:
“La pobreza está por sobrecoger a este mundo, y habrá un tiempo de angustia como nunca ha habido hasta ahora. Habrá guerras y rumores de guerra, y la palidez invadirá los rostros de los hombres. Puede ser que Ud. tenga que sufrir angustia; puede ser que algunas veces pase hambre; pero Dios no lo olvidará en su sufrimiento. El probará su fe. No debemos vivir para agradarnos. Estamos aquí para dar a conocer a Cristo al mundo, para representarlo a él y su poder ante la humanidad (Manuscrito 37, 1894).” El Evangelismo, pág. 180.
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