La manipulación del clima, conocida como geoingeniería, ha existido por milenios y siempre ha generado controversia. Esta vez, el gobierno de los Estados Unidos ha recomendado estudios en dos áreas de investigación de la geoingeniería. E incluso ha hablado sobre rociar dióxido de azufre en la atmósfera para formar nubes y enfriar artificialmente la Tierra, como si se tratase de algo que se deba hacer en el futuro para mantener el calentamiento global bajo control. Y que esto podría hacerse en combinación con la reducción de los gases que ocasionan el efecto invernadero.
No es difícil imaginar aviones rociando productos químicos por toda la atmósfera. Así mismo, el hecho de que el gobierno esté hablando al respecto nos sugiere que ya podría estar sucediendo.
Sin embargo, cada vez que el hombre interviene en la naturaleza, hay consecuencias involuntarias que crean más problemas. «…Detener repentinamente la fumigación podría ocasionar un impacto ‘devastador’ a nivel global en animales y plantas, conduciéndolos a la extinción», según el primer estudio sobre los posibles impactos biológicos de la intervención climática publicado por el British Journal Nature Ecology & Evolution.
«El calentamiento rápido que ocurriría tras detener la geoingeniería sería una gran amenaza para el medio ambiente natural y la biodiversidad», dijo el coautor del estudio Alan Robock de la Universidad de Rutgers. «Si en algún momento se detiene abruptamente la geoingeniería, sería devastador. Por ello, se debe garantizar su posible detención gradual pero es fácil pensar en escenarios que no lo permitirían».
«La idea detrás de este tipo de geoingeniería sería la creación de una nube de ácido sulfúrico en la atmósfera superior con una reacción similar a la producida por erupciones volcánicas», dijo Robock. «Las nubes, formadas después que los aviones rocíen dióxido de azufre, causarían que la radiación solar sea reflejada y por lo tanto, se enfríe el planeta».
El calentamiento rápido ha obligado a los animales a tener que emigrar. Pero aunque puedan migrar lo suficientemente rápido, es posible que no encuentren lugares con suficiente comida para sobrevivir, indicó el estudio. «Por supuesto, las plantas no pueden migrar. Y algunos animales pueden hacerlo y otros no», dijo Robock.
Comenzar la geoingeniería y luego tener que detenerla de repente no es necesariamente exagerado. «Imagine que se culpe a la geoingeniería por las grandes sequías o inundaciones alrededor del mundo y se exija que debe ser detenida. ¿Podríamos asumir ese riesgo?», Robock preguntó.
La geoingeniería se inspira en la erupción del Monte Pinatubo en Filipinas en 1991, el cual explotó más de 15 millones de toneladas de dióxido de azufre a 21 millas de altura, directamente en la estratosfera. La estratosfera mantuvo suspendidas esas partículas de azufre en el aire de todo el globo. Antes de desaparecer, la neblina creada se dispersó y reflejó la luz solar lejos de la Tierra causando un descenso en las temperaturas atmosféricas globales de casi 0.7 a 0.9 grados Fahrenheit en 1992 y 1993, según el Instituto Goddard de la NASA para Estudios Espaciales.
Los aviones que rocían el dióxido de azufre tendrían que volar continuamente a la atmósfera superior para mantener la nube, ya que ésta solo duraría alrededor de un año si se detuviera la fumigación, dijo Robock. La tecnología de rociamiento a través de aviones podría estar desarrollada dentro de una década o dos, agregó.
Las personas de la torre de Babel también trataron de manipular el clima. Ellas temían que se produjese otra inundación en la tierra y trataron de resolver cuál era la causa de las mega tormentas. Sin embargo, su experiencia ilustra proféticamente lo que sucederá en nuestros días antes de la venida del Señor. “Y al poder ascender a la región de las nubes, esperaban descubrir la causa del diluvio”. Patriarcas y Profetas, pág. 99.
En otras palabras, debido que ellos negaban la existencia de Dios, consecuentemente trataron de entender el mundo natural a través de los ojos de la ciencia secular. ¿Por qué querrían entender la causa del diluvio? Lo más probable es que deseaban encontrar una manera de manipular el clima a fin de evitar otro. Hoy en día, los hombres que no reconocen a Dios, tratan de entender y modificar el clima de la misma manera. Aunque la tecnología sea bastante diferente a la de la torre, el principio subyacente es el mismo. Estos modernos constructores de Babel todavía están tratando de alcanzar el cielo.
«Y ellos dijeron: Id a construir una ciudad y una torre, cuya cima alcance los cielos…» Génesis 11:4.
Comments
Jim
14 de febrero de 2018 at 16:40 04Wed, 14 Feb 2018 16:40:11 +000011.how stupid can men be to come up with this kind of global warming ‘prevention’ insanity????
Joanne
24 de febrero de 2018 at 03:41 03Sat, 24 Feb 2018 03:41:51 +000051.They’ve.been.doing.this.for.years.