NBC News, por Fiona Bork: Una especie de garrapata invasora se está extendiendo por más zonas del país, ya que el aumento de las temperaturas le ayuda a propagar una infección poco conocida que puede provocar síntomas debilitantes y, en casos excepcionales, la muerte.
En mayo, científicos de la Estación Experimental Agrícola de Connecticut en New Haven descubrieron por primera vez que la garrapata de cuernos largos se había convertido en portadora de la bacteria que causa la infección de Ehrlichiosis. Con los casos ya en aumento, eso fue motivo de gran preocupación.
«Me temo que se avecina una tormenta», dijo Goudarz Molaei, director del programa de pruebas de garrapatas del laboratorio. «El cambio climático acabará eliminando casi por completo el invierno en nuestra región. Y esta garrapata, al igual que otras especies, estará activa durante todo el año».
El aumento de las temperaturas, que ya se ha traducido en inviernos más cortos, permite que la garrapata de cuernos largos y otras especies de garrapatas salgan antes de la hibernación, lo que aumenta el riesgo de picaduras.
La garrapata de cuernos largos, originaria del este de Asia, invadió primero lugares como Australia, Nueva Zelanda y las islas del Pacífico. Ahora se ha detectado en al menos 21 estados, y Michigan informó de su primer avistamiento a finales de junio. Los investigadores no están seguros de cómo llegó la garrapata a Estados Unidos, pero es probable que lo hiciera a lomos de ganado importado u otros animales.
En 2017, los científicos identificaron la primera garrapata de cuernos largos del país en Nueva Jersey, aunque es probable que la especie haya estado presente en Estados Unidos desde al menos 2010.
«El hecho de que llevara aquí tanto tiempo sin que lo supiéramos fue realmente una llamada de atención», afirmó Dana Price, profesora investigadora asociada del departamento de entomología de la Universidad de Rutgers.
Los modelos indican que las zonas del sur de Canadá y todo el territorio continental de Estados Unidos son ambientalmente adecuadas para la garrapata de cuernos largos.
Eso significa que la amenaza es doble: el área de distribución geográfica de la garrapata de cuernos largos se está expandiendo, al igual que el tiempo en que está activa y es capaz de transmitir enfermedades, según los científicos.
La ehrlichiosis se está volviendo tan prevalente que hay una región del país que lleva su nombre de manera no oficial: el «cinturón de la ehrlichiosis» se extiende desde el norte, en Connecticut y Nueva York, hasta el oeste, en Arkansas.
Las garrapatas estrella solitaria y de patas negras han sido portadoras durante mucho tiempo de Ehrlichia chaffeensis, la bacteria que causa la ehrlichiosis. Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, la infección envía al hospital a alrededor del 60 % de los pacientes y mata a aproximadamente 1 de cada 100. Las personas infectadas suelen presentar fiebre, escalofríos, dolores musculares, dolores de cabeza y fatiga entre una y dos semanas después de haber sido picadas. Pero si no se tratan rápidamente, la infección puede provocar en ocasiones daños en el cerebro y el sistema nervioso, insuficiencia respiratoria, hemorragias incontroladas y fallo orgánico.
El número de casos de ehrlichiosis ha aumentado de forma constante desde el año 2000, cuando los CDC registraron 200 casos, en comparación con los 2093 casos registrados en 2019. Los estudios sugieren que el número de casos anuales de ehrlichiosis está muy infrarrepresentado, y un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Rutgers afirma que el 99 % de los casos no se detectan.
El CDC informó este mes que en julio se registraron más visitas a urgencias por picaduras de garrapatas que en los ocho julios anteriores. A principios de julio, las autoridades cerraron Pleasure Beach, un popular lugar de baño en Bridgeport, Connecticut, durante el verano después de descubrir una infestación de varias especies de garrapatas, incluida la garrapata de cuernos largos.
Manisha Juthani, comisionada del Departamento de Salud Pública de Connecticut, afirmó que, dado que el cambio climático hace que la «temporada de garrapatas» sea menos predecible, los residentes de Connecticut deben tomar precauciones como llevar pantalones largos y meterlos dentro de los calcetines, así como revisar a los miembros de la familia y a las mascotas en busca de garrapatas después de haber estado al aire libre durante largos periodos de tiempo.
«La realidad es que, con los cambios que estamos viendo en el clima, tenemos que estar más preparados y ser más conscientes de las infecciones y los patógenos a los que podemos estar expuestos al estar al aire libre y, potencialmente, ser conscientes de las cosas que realmente pueden causar más daño a las personas», dijo Juthani.
Aunque las garrapatas de cuernos largos suelen preferir la sangre del ganado a la de los seres humanos, los entomólogos afirman que su singular biología las convierte en un peligro formidable para la salud pública. Pueden establecer poblaciones de miles a partir de una sola hembra porque, al igual que las abejas, tienen la capacidad de reproducirse sin pareja.
También pueden ingerir y convertirse en portadoras de patógenos que suelen transmitir otras especies de garrapatas si se alimentan del mismo huésped. Este proceso, conocido como transmisión por coalimentación, es común entre la mayoría de las especies de garrapatas.
Molaei afirmó que su reciente descubrimiento de la bacteria causante de la ehrlichiosis en la garrapata de cuernos largos suscita preocupación sobre qué otros patógenos puede contraer y transmitir al ser humano esta garrapata. La garrapata de cuernos largos y la garrapata estrella solitaria, uno de los portadores originales de Ehrlichia, se alimentan de huéspedes similares, como el ciervo de cola blanca.
«Vivimos en esta parte del mundo con varias especies importantes de garrapatas, y tenemos que aprender a convivir con tantas garrapatas», dijo Molaei. «Y la clave es protegernos».
La Organización Mundial de la Salud informa que más del 17 % de las enfermedades infecciosas a nivel mundial se transmiten a través de vectores, animales intermediarios que transportan virus, bacterias y otros patógenos de un animal a otro. Las enfermedades transmitidas por garrapatas en Estados Unidos representaron el 77 % de los casos de enfermedades transmitidas por vectores entre 2004 y 2016, y los casos se han más que duplicado en los últimos 13 años, según los datos recopilados por los CDC.
Jennifer Platt fue picada por una garrapata durante ese tiempo. Contrajo ehrlichiosis por la picadura de una garrapata en Carolina del Norte en el verano de 2011.
Cuando no podía levantar y cargar a su hijo de 2 años, una amiga que es enfermera le sugirió que fuera al hospital de inmediato. La amiga sospechaba que Platt podría tener una infección transmitida por garrapatas.
Platt estuvo enferma y tomó antibióticos durante meses después de su diagnóstico. Su hombro se bloqueó debido a la infección, un síntoma crónico poco común pero contagioso de la enfermedad transmitida por garrapatas, lo que la llevó a meses de fisioterapia y la dejó sin trabajo durante tres meses.
Le llevó más de un año recuperarse por completo de los efectos duraderos de la infección.
«La mejor manera de describirlo», dijo, «es que me sentía como si estuviera muriendo».
Unos años después de empezar a sentirse mejor, le diagnosticaron las enfermedades de Lyme y babesiosis, que ella atribuye a la misma picadura de garrapata.
Platt, cofundadora de la organización sin ánimo de lucro Tick-Borne Conditions United, dijo que espera que el reciente descubrimiento de la bacteria Ehrlichia en la garrapata de cuernos largos ayude a concienciar a los médicos y al público en general sobre la amenaza de las enfermedades transmitidas por garrapatas, especialmente las poco conocidas como la ehrlichiosis.
«Mi misión en la vida es ayudar a las personas a ser quienes son», dijo Platt. «Y si estás enfermo por una enfermedad transmitida por garrapatas, no puedes ser quien eres».
Conexión Profética:
“El pueblo de Dios no quedará libre de padecimientos; pero aunque perseguido y acongojado y aunque sufra privaciones y falta de alimento, no será abandonado para perecer. El Dios que cuidó de Elías no abandonará a ninguno de sus abnegados hijos. El que cuenta los cabellos de sus cabezas, cuidará de ellos y los atenderá en tiempos de hambruna. Mientras los malvados estén muriéndose de hambre y pestilencia, los ángeles protegerán a los justos y suplirán sus necesidades. Escrito está del que «camina en justicia» que «se le dará pan y sus aguas serán ciertas.» «Cuando los pobres y los menesterosos buscan agua y no la hay, y la lengua se les seca de sed, yo, Jehová, les escucharé; yo, el Dios de Israel, no los abandonará.» (Isaías 33: 16; 41: 17, V.M.)” El Conflicto de los Siglos, pág. 687.
Comments