USA Today, por Michael Collins y Joey Garrison: Un club nocturno que fue el lugar de un horrible tiroteo en Florida se convirtió el viernes en un monumento nacional.
El presidente Joe Biden firmó una ley que designa al club nocturno Pulse de Orlando como monumento nacional en una ceremonia en la Casa Blanca que incluyó a los sobrevivientes del ataque de 2016.
«Un lugar de aceptación y alegría se convirtió en un lugar de dolor y pérdida indescriptibles. Nunca nos recuperaremos del todo, pero lo recordaremos», dijo Biden antes de firmar la ley que designa el memorial. Los supervivientes de Pulse se situaron alrededor del presidente mientras las imágenes de los 49 fallecidos se mostraban en pantallas de vídeo.
«Que ningún presidente tenga que firmar otro monumento como éste», dijo Biden.
En otro acto en la Casa Blanca, Biden conmemoró el mes del orgullo nombrando a la defensora Jessica Stern como enviada especial para promover los derechos humanos de las personas LGBTQ en todo el mundo. Stern es directora ejecutiva de OutRight Action International, un grupo con sede en Nueva York que trabaja para hacer frente a las violaciones y abusos de los derechos humanos contra las personas LGBTQ.
El puesto de enviado especial fue creado en el Departamento de Estado en 2015, pero ha estado vacante desde que el predecesor de Stern, Randy Berry, dejó el trabajo en 2017. El entonces presidente Donald Trump decidió no sustituir a Berry.
En la firma de la ley, Biden dijo que el monumento a Pulse representa un «monumento a la pérdida que ocurrió» y «una determinación absoluta de que vamos a lidiar con esto cada día, y asegurarnos de que no estamos en condiciones de ver que esto suceda de nuevo.»
El presidente dijo que los asesinados eran «miembros de la familia, padres, amigos, veteranos, estudiantes, jóvenes, negros, asiáticos, latinos, todos compatriotas».
«Y en su memoria, y por los incontables otros marcados para siempre, es por lo que firmo esto hoy».
La primera dama, Jill Biden, y los miembros del Caucus de Igualdad del Congreso, como la senadora Tammy Baldwin, demócrata de Wisconsin, y el representante David Cicilline, demócrata de Rhode Island, también asistieron a la firma. A ellos se unió la teniente coronel Bree Fram, una de las militares transgénero de más alto rango, y las defensoras de los jóvenes transgénero Stella Keating y Ashton Mota, del GenderCool Project.
La Fundación onePulse, el grupo sin fines de lucro que está detrás de la iniciativa de crear un monumento conmemorativo, dijo en un comunicado que la designación nacional significa «que nuestro gobierno federal reconoce la profundidad de la tragedia de Pulse» y envía un mensaje de que «siempre superaremos el odio».
Biden, a quien muchos defensores consideran el presidente más respetuoso con el colectivo LGBTQ de la historia, ha tomado varias medidas para proteger los derechos de los homosexuales y transexuales desde que asumió el cargo en enero.
En su primer día en el cargo, firmó una orden ejecutiva que ordena a las agencias federales que se aseguren de que los estatutos que cubren la discriminación sexual también prohíben la discriminación por orientación sexual e identidad de género. También anuló la prohibición de la administración Trump de que los miembros del servicio abiertamente transgénero sirvieran en el ejército.
La ley del club nocturno Pulse forma parte de un esfuerzo por construir un monumento permanente en el lugar en honor a las 49 personas asesinadas a tiros hace cinco años por un hombre armado con un rifle de asalto estilo AR-15. Los planes prevén una piscina reflectante, un museo al aire libre y un centro educativo con jardines y una plaza pública.
Se calcula que el proyecto costará 45 millones de dólares. La nueva ley dicta que no se pueden utilizar fondos federales para establecer el monumento, pero los gobiernos del condado y del estado, así como varias empresas, han donado millones de dólares para el proyecto. El monumento no será una unidad del Sistema de Parques Nacionales.
El ataque al club en la madrugada del 12 de junio de 2016 fue el tiroteo masivo más mortífero del país hasta que un pistolero mató a 60 personas en un festival de música country en Las Vegas un año después.
El pistolero de Pulse, Omar Mateen, mató a 49 personas e hirió a otras 53 en el club antes de morir en un tiroteo con la policía. Los clientes del club nocturno dijeron que Mateen había frecuentado el bar durante años.
La legislación para establecer el monumento fue aprobada por el Senado el 9 de junio, tres días antes del quinto aniversario del atentado. La Cámara de Representantes aprobó su propia versión del proyecto de ley el 12 de mayo.
En el acto del Orgullo en la Sala Este de la Casa Blanca, Biden celebró los avances logrados en materia de derechos LGBTQ, pero advirtió que la lucha está lejos de terminar.
Se le unieron otros miembros LGBTQ de su administración, entre ellos el Secretario de Transporte Pete Buttigieg, quien advirtió de «una estrategia política especialmente peligrosa» que está surgiendo en algunos estados que están impulsando una serie de nuevas leyes para restringir los derechos de los transexuales.
Buttigieg, el primer secretario de gabinete abiertamente gay confirmado por el Senado, acusó a los políticos que están detrás de esas leyes de intentar obtener una ventaja política «metiéndose con los niños transgénero».
En sus declaraciones, Biden pidió al Congreso que aprobara la Ley de Igualdad, que ampliaría las protecciones de la Ley de Derechos Civiles de 1964 para prohibir la discriminación por razón de sexo, orientación sexual e identidad de género. También denunció las leyes estatales que atacan los derechos de los transexuales como «algunas de las leyes más feas y antiamericanas que he visto».
En general, sin embargo, el ambiente era festivo, y Biden declaró: «El orgullo ha vuelto a la Casa Blanca».
«Esta tarde lo celebramos», dijo. «Mañana volvemos al trabajo. El progreso no será fácil. Nunca lo ha sido. Pero vamos a mantenernos firmes, a mantenernos unidos».
Nuestro comentario:
La gente hará cualquier cosa para glorificar y ganar simpatía por el pecado.
Conexión Profética:
«Los mismos pecados que trajeron juicios sobre el mundo en los días de Noé, existen en nuestros días. Los hombres y las mujeres de hoy llevan su comer y beber tan lejos que terminan en la gula y la embriaguez. Este pecado prevaleciente, la indulgencia del apetito pervertido, inflamó las pasiones de los hombres en los días de Noé, y condujo a la corrupción generalizada. La violencia y el pecado llegaron hasta el cielo. Esta contaminación moral fue finalmente barrida de la tierra por medio del diluvio. Los mismos pecados de glotonería y embriaguez entorpecieron la sensibilidad moral de los habitantes de Sodoma, de modo que el crimen parecía ser el deleite de los hombres y mujeres de esa perversa ciudad. Cristo advierte así al mundo: ‘Así también fue en los días de Lot: comían, bebían, compraban, vendían, plantaban y construían; pero el mismo día que Lot salió de Sodoma llovió fuego y azufre del cielo, y los destruyó a todos. Así será también el día en que se manifieste el Hijo del Hombre». Lucas 17:28-30″. Templanza Cristiana e Higiene Bíblica, página 11.1.