El presidente Donald Trump anunció [que] está nominando al juez Brett Kavanaugh para ocupar la vacante en la Corte Suprema que deja el juez Anthony Kennedy, quien anunció su retiro el 27 de junio.
«En un breve discurso después del anuncio, Kavanaugh habló sobre la importancia de su educación católica y cómo ha influido en su carrera».
Aparentemente Kavanaugh se siente muy conectado con los jesuitas. En sus comentarios, Kavanaugh decidió destacar su formación educativa en Georgetown Prep, una importante escuela secundaria jesuita cerca de Washington, DC, y dijo que «El lema de mi escuela secundaria jesuita era ‘hombres para los demás'»; «he tratado de vivir ese credo.»
«Soy parte de la vibrante comunidad católica en el área de D.C.», agregó. Él también hizo una mención especial de Msgr. John Enzler, presidente y director ejecutivo de Catholic Charities, que estuvo presente en el anuncio. «Hace 40 años, yo era un monaguillo para el padre John», dijo Kavanaugh, agregando que ahora ellos sirven a las personas sin hogar a través de su trabajo con Catholic Charities.
Kavanaugh actualmente sirve en el Tribunal de Apelaciones del Circuito de DC y lo ha hecho desde 2006. Anteriormente, trabajó en la Casa Blanca para George W. Bush.
Bush dijo que Kavanaugh «es un brillante jurista que ha aplicado fielmente la Constitución y las leyes a lo largo de sus 12 años en el Circuito D.C. Es un buen esposo, padre y amigo, un hombre de la más alta integridad».
Kavanaugh fue asistente del juez Kennedy, un católico a quien él está nominado para reemplazar.
Se graduó con títulos universitarios y de leyes en la Universidad de Yale. Él y su esposa, Ashley, tienen dos hijas.
La nominación de Kavanaugh, si es confirmada por el Senado de EE. UU. a la corte, será compuesta principalmente por cinco católicos romanos, tres judíos y un episcopal.
Aunque el Juez Kavanaugh probablemente no es jesuita, ciertamente ha aprendido a pensar como ellos. Fue orientado así durante algunos de sus años clave de formación, y ciertamente los conoce bien. Él habla muy bien de ellos. ¿Ofrecerán los jesuitas consejos al juez Kavanaugh tras bastidores sobre casos claves? La mano oculta de Roma permanecerá bastante fuerte en la jurisprudencia de EE. UU.
“Con muy diversos disfraces se introducían los jesuitas en los puestos del estado, elevándose hasta la categoría de consejeros de los reyes, y dirigiendo la política de las naciones.” El Conflicto de los Siglos, pág. 250.