Crux, por Christopher White: El secretario de Asuntos Exteriores del Vaticano, el arzobispo Paul Gallagher, elogió el miércoles la relación entre Estados Unidos y la Santa Sede como «fuerte y sólida» durante una visita a la capital de la nación.
Los comentarios del segundo diplomático de más alto rango del Vaticano tuvieron lugar durante la inauguración de una exposición en el Centro de Diplomacia de Estados Unidos que conmemora el 35º aniversario del establecimiento formal de relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y el Vaticano.
El embajador de Estados Unidos en el Vaticano, Callista Gingrich, quien abrió la ceremonia, dijo que la relación era «una de las asociaciones diplomáticas más importantes de la historia.»
Gingrich lo describió como «un vínculo que existía desde la fundación de nuestra nación», que es hoy una «asociación global basada en valores comunes, respeto mutuo y liderazgo moral.»
Describió cuatro grandes áreas de compromiso compartido a través de «la salvaguardia de los derechos humanos, la defensa de la libertad religiosa, la mediación en conflictos y la prestación de asistencia humanitaria» en todo el mundo.
El evento y la inauguración de la exposición tuvieron lugar junto con la Segunda Reunión Ministerial Anual para Avanzar la Libertad Religiosa, patrocinada por el Departamento de Estado de Estados Unidos, donde el miércoles Gingrich anunció que en octubre Estados Unidos y el Vaticano copatrocinarían una cumbre sobre la libertad religiosa.
Durante su discurso, Gallagher relató la larga historia de los lazos entre Estados Unidos y la Santa Sede, que se remontan a dos siglos antes de que se estableciera un acuerdo formal bajo el mandato del Papa Juan Pablo II y del Presidente Ronald Reagan en 1984.
Gallagher recordó que el primer presidente de Estados Unidos, George Washington, aseguró la libertad al Papa Pío VI en su nombramiento de obispos, marcando el primer compromiso entre Estados Unidos y la Santa Sede.
Mucho antes de que se establecieran los vínculos formales, Gallagher señaló que los presidentes de Estados Unidos disfrutaban de consultas y visitas regulares con Roma. Luego, en marzo de 1984, William Wilson fue nombrado primer embajador ante la Santa Sede.
En la ocasión estuvieron presentes los ex embajadores de Estados Unidos ante el Vaticano Jim Nicholson y Miguel Díaz, quienes sirvieron bajo los presidentes George W. Bush y Barack Obama, respectivamente, el actual embajador papal en Estados Unidos, el arzobispo Christophe Pierre, y el embajador para la Libertad Religiosa Internacional, el ex senador Sam Brownback.
Nicholson también se dirigió a los asistentes, recordando que cuando se le preguntó a Washington sobre los nombramientos episcopales en Estados Unidos, dijo que la libertad religiosa era la razón por la que se había fundado el país.
Si alguien duda de la eficacia de la colaboración entre Estados Unidos y el Vaticano, Nicholson sugirió que no miraran más allá de la Unión Soviética – un guiño a la asociación entre Reagan y Juan Pablo II para provocar el colapso del comunismo.
Los Caballeros de Colón, uno de los principales socios de Crux, también patrocinaron el evento.
El Caballero Supremo Carl Anderson también señaló el colapso de la Unión Soviética, quien le dijo a Crux que fue un colapso pacífico «sin violencia generalizada», y una de las mayores historias de éxito de la diplomacia vaticano-estadounidense.
También destacó la «restauración o emergencia de la democracia en América Latina», donde «las dictaduras militares fueron sustituidas por la democracia» como parte del «fuerte liderazgo» de las dos entidades, junto con la «atención al genocidio en Oriente Medio y los derechos de las minorías en esa región» como un área de asociación permanente.
Anderson recordó que en 1982, el Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Agostino Casaroli, viajó a la convención del centenario de los Caballeros donde él y el Presidente Ronald Reagan se reunieron en privado para discutir los planes para el establecimiento formal de lazos diplomáticos entre Estados Unidos y la Santa Sede.
«Estados Unidos es también un líder moral», dijo Anderson, y «el mundo necesita ambas brújulas morales.»
«La Santa Sede tiene una larga experiencia diplomática en prácticamente todos los países del mundo. Traen una perspectiva que en muchas circunstancias es única», dijo a Crux.
El Centro de Diplomacia de Estados Unidos, que es el primer museo nacional dedicado a la diplomacia, presentará la exposición del 35º aniversario que marca las relaciones diplomáticas entre el Vaticano y Estados Unidos durante el próximo año, y según Gingrich, será el anfitrión de una serie de debates y eventos en curso sobre el tema.
Durante su conclusión, Gallagher recordó la visita del Papa Francisco a los Estados Unidos en 2015, donde ensalzó el compromiso del país con la libertad religiosa como un principio definitorio.
«Todos estamos llamados a estar atentos para preservar y defender esa libertad», dijo Gallagher.
Nuestro Comentario:
Noten que el Caballero Supremo Anderson habló de los Estados Unidos y el Vaticano como «brújulas morales» en el mundo. El mundo seguirá a los Estados Unidos en apoyo del Vaticano, lo que eventualmente llevará al establecimiento de leyes religiosas.
Conexión Profética:
“Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia…Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón. Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada.” Apocalipsis 13:3, 11-12.