El pasado 28 de mayo, el Presidente de Singapur, Tony Tan Keng Yam, se reunió con el Papa Francisco en el Vaticano con motivo de la celebración de los 35 años de relaciones diplomáticas entre este país del sudeste asiático y la Santa Sede. Esta ha sido la primera visita de estado de un presidente de Singapur. Las relaciones diplomáticas comenzaron en 1981 durante el pontificado de Juan Pablo II.
Los dos hombres debatieron cordialmente «la importancia del diálogo entre religiones y culturas para la promoción de los derechos humanos, la estabilidad, la justicia y la paz en el sudeste de Asia», dijo un comunicado del Vaticano. También hablaron sobre la colaboración entre la Iglesia y el Estado, especialmente en educación y esferas sociales.
El Papa Francisco le entregó al presidente Tan una medalla de la paz y una copia de su encíclica Laudato Sí. El Presidente Tan dijo que el cambio climático «es un gran problema» y agradeció al Papa por hablar acerca de ello.
El Presidente dio al Papa un grabado de los Jardines de Singapur en el parque natural de la Bahía y un libro acerca de las flores exóticas de su país.
Como es habitual en las visitas diplomáticas al Vaticano, el Presidente Tan también se reunió con el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, junto con el arzobispo Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados.
«Y todo el mundo se maravilló en pos de la bestia». Apocalipsis 13: 3.