Los pastores conservadores se reunieron en el Capitol Hill de Washington, donde se unieron a decenas de miembros del Congreso para una reunión denominada “Congressional-Clergy Town Hall” organizada por los Wallbuilders, una organización dirigida por el activista religioso y radical de la derecha, David Barton y por el Jefferson Gathering, una organización de oración.
Dos de los pastores que participaron en el evento, Dave Kistler de Carolina del Norte, y Dale Walker de la Red de Pastores de Tennessee hablaron sobre sus experiencias en el programa radial Stand in the Gap de la Red de Pastores de Estados Unidos.
Kistler reveló que el capellán del senado de los EUA, Barry Black, un adventista del séptimo día, predicó a los participantes y les informó sobre la profecía de que un reavivamiento estaría por acontecer en los Estados Unidos y que “comenzaría… en los pasillos del Congreso”.
“Si Dios va a gobernar en los pasillos legislativos, es beneficioso que el púlpito esté ubicado allí para ponernos de pie, hablar sobre la Ley de Dios a nuestros líderes elegidos y orar por ellos”, dijo Walker. “La ausencia de púlpitos es la razón por la cual Satanás reina en los pasillos legislativos”.
Kistler también reveló que a los pastores se le había dado acceso a la cámara del Senado. Allí “doblamos nuestras rodillas… y se escuchaba casi como una sala de partos donde las personas clamaban a Dios por el reavivamiento que el capellán Black cree que vendrá y que creemos que está llegando”.
“Hacer esto en la cámara del Senado fue una oportunidad absolutamente sorprendente”, dijo Kistler, “y otra vez puso el punto de exclamación en la predicación del capellán del senado, de que el reavivamiento está por llegar y que comenzará ciertamente en los pasillos del Congreso”.
“Hará aparecer como que la bendición especial de Dios es derramada sobre las iglesias que pueda colocar bajo su poder seductor; allí se manifestará lo que se considerará como un gran interés por lo religioso. Multitudes se alegrarán de que Dios esté obrando maravillosamente en su favor, cuando, en realidad, la obra provendrá de otro espíritu. Bajo un disfraz religioso, Satanás tratará de extender su influencia sobre el mundo cristiano”. El Conflicto de los Siglos, pág. 517.
“El último gran engaño se desplegará pronto ante nosotros. El Anticristo va a efectuar ante nuestra vista obras maravillosas. La falsificación se asemejará tanto a la realidad, que será imposible distinguirlos sin el auxilio de las Santas Escrituras. Ellas son las que deben atestiguar en favor o en contra de toda declaración, de todo milagro”. El Conflicto de los Siglos, pág. 651.