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“Puntos Comunes de Doctrina”: ¿Ha Sanado la Herida Mortal?

By Pastor Hal Mayer

Estimados amigos,

Bienvenidos una vez más al Ministerio Guardad la Fe. Hoy vamos a analizar el impacto del movimiento ecuménico en el mundo. Éste ha abierto las puertas secretas de oportunidades para una determinada organización global que está tratando de gobernar el mundo y llevar a la extinción al pueblo de Dios. Pero primero permítanme decirles cuánto aprecio vuestro apoyo a nuestra misión. Confiamos en sus oraciones y donaciones, porque son la única manera en que podemos proporcionarles mensajes espirituales que bendicen sus almas. Muchas gracias por vuestro apoyo.

Oremos. Padre celestial, vemos las señales de los tiempos que se desarrollan a nuestro alrededor y nos damos cuenta que necesitamos Tu gracia y poder en nuestras vidas para prepararnos para los próximos eventos. Nos damos cuenta que estamos en los últimos días y que somos la última generación con un mensaje y una misión únicos. A medida que surjan los peligros, que nuestro valor y fortaleza se renueven y que Tú puedas eliminar el temor con tu presencia. Ruego que pueda ser fiel a tu mensaje. Te pido que todos los que están escuchando este mensaje también puedan ser fieles. Y mientras estudiamos el movimiento ecuménico hoy, oro para que nos hables a través de tu Espíritu Santo. Enséñanos lo que necesitamos saber. En el nombre de Jesús, amén.

Vayamos en nuestras Biblias a Apocalipsis 13:3

“Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia”,

Quisiera que piensen por un minuto en la curación de la herida mortal. Berthier, el general del ejército de Napoleón infligió la herida al derribar al Papado de su posición de persecución y prestigio político. Pero la Biblia nos dice que no será así para siempre. En el fin de los tiempos, la herida mortal será sanada. Esta curación ha estado ocurriendo gradualmente durante muchas décadas, particularmente desde el final del Concilio Vaticano II en 1965. El Concilio Vaticano II comenzó el proceso de reconciliación con las iglesias separadas de su comunión. Ha sido una tarea larga, lenta y ardua que involucra a varios Papas en los años intermedios de Pablo VI, quien supervisó la conclusión del concilio; Juan Pablo I, que fue Papa durante 33 días; y Juan Pablo II, que reinó durante 26 años. Luego Benedicto XVI y ahora el Papa Francisco los sigue. Los anglicanos y episcopales, luteranos, presbiterianos, metodistas y otras iglesias principales han estado involucrados durante mucho tiempo con el movimiento ecuménico y se han estado acercando cada vez más a Roma. El Papa Francisco ha atraído a los valdenses, a los pentecostales y a los evangélicos. Incluso ha comenzado a atraer a la última iglesia global restante que tiene un mensaje de advertencia para salir de Babilonia y unirse al pueblo remanente de Cristo.

El movimiento ecuménico ha existido desde hace mucho tiempo. Uno de sus propósitos subyacentes es llegar a las otras iglesias no católicas y reducir o eliminar sus objeciones a las enseñanzas y prácticas de Roma. Pero hay algo más importante en la agenda del Vaticano que debemos entender. Algunos de los propósitos clave del movimiento ecuménico están ocultos para la mayoría de las personas. Roma lo ve, pero la mayoría de los protestantes no lo ven.

Permítanme señalar también que los jesuitas se establecieron para deshacer todo lo que el protestantismo ha hecho. Y como el movimiento ecuménico ha sido dirigido a los protestantes, entre otros, no es sorprendente que los jesuitas también estén involucrados. Escuchen esta importante declaración.

“En toda la cristiandad se veía amenazado el protestantismo por formidables enemigos. Pasados los primeros triunfos de la Reforma, Roma reunió nuevas fuerzas con la esperanza de acabar con ella. Entonces fue cuando nació la orden de los jesuitas, que iba a ser el más cruel, el menos escrupuloso y el más formidable de todos los campeones del papado. Libres de todo lazo terrenal y de todo interés humano, insensibles a la voz del afecto natural, sordos a los argumentos de la razón y a la voz de la conciencia, no reconocían los miembros más ley, ni más sujeción que las de su orden, y no tenían más preocupación que la de extender su poderío… Para ellos ningún crimen era demasiado grande, ninguna mentira demasiado vil, ningún disfraz demasiado difícil de llevar. Ligados por votos de pobreza y de humildad perpetuas, estudiaban el arte de adueñarse de la riqueza y del poder para consagrarlos a la destrucción del protestantismo y al restablecimiento de la supremacía papal.” El Conflicto de los Siglos pág. 249.

Pero no eran solo los jesuitas; Roma tuvo que encontrar algunas maneras bien pensadas de socavar a los protestantes sin que ellos se dieran cuenta. Hasta la década de 1960 y el Concilio Vaticano II, continuaron las hostilidades y las polémicas entre católicos romanos y protestantes. Roma tuvo que pensar en cómo atraer a todo el mundo bajo su poder político global y curar esa herida mortal.

Uno de los elementos clave para hacerlo fue la introducción del liberalismo en las iglesias protestantes. El liberalismo alejó a los protestantes de sus bases bíblicas y barreras morales, dejándolos vulnerables al acercamiento de Roma. En las iglesias protestantes surgieron toda clase de conflictos, porque ya no tenían un punto focal que los uniera. Como resultado, la perspectiva ecuménica de Roma parece atractiva.

Otro elemento clave para lograr que las iglesias se unan al movimiento ecuménico es la colaboración de Roma en varios proyectos sociales de importancia para los protestantes. Estos proyectos incluyen desde comedores populares, protestas contra el aborto y hasta la defensa de la libertad religiosa. De hecho, Roma le ha quitado el tema de la libertad religiosa a los adventistas del séptimo día, especialmente porque los adventistas del séptimo día han disminuido su papel y participación en la defensa de la libertad religiosa.

Las iglesias protestantes también han perdido sus bases de muchas otras maneras:

“Pero el romanismo, como sistema, no está actualmente más en armonía con el Evangelio de Cristo que en cualquier otro período de su historia. Las iglesias protestantes se hallan sumidas en grandes tinieblas, pues de lo contrario discernirían las señales de los tiempos. La iglesia romana abarca mucho en sus planes y modos de operación. Emplea toda clase de estratagemas para extender su influencia y aumentar su poder, mientras se prepara para una lucha violenta y resuelta a fin de recuperar el gobierno del mundo, restablecer las persecuciones y deshacer todo lo que el protestantismo ha hecho.” El Conflicto de los Siglos, pág. 621.

La mayoría de la gente no tiene idea de cuáles son los verdaderos propósitos de Roma. No ven que mientras Roma los ha involucrado en el movimiento ecuménico, han abierto la puerta secreta para que ella recupere la supremacía que tenía en el mundo antiguo. No se dan cuenta de que al permitir que Roma tenga más oportunidades políticas y compromiso con los líderes del gobierno, le han dado las herramientas que necesita para convertirse en el gobernante mundial. Pero la gente no lo ve porque realmente no creen en la Biblia. Si creyeran, verían que se predice que Roma se convertirá en el maestro titiritero mundial.

En este momento la gente piensa que está bien que los católicos estén en un liderazgo nacional o incluso mundial, y piensan que es mejor si un político tiene capacitación jesuita. No reconocen el peligro de Roma y la razón es por el movimiento ecuménico. La razón de la ascendencia de Roma y su creciente poder y la voz apagada de los protestantes, es el movimiento ecuménico. La Biblia predijo estos hechos cuando dijo que la herida mortal sería sanada. Consideremos esta importante declaración de El Conflicto de los Siglos.

“Cuando las iglesias principales de los Estados Unidos, uniéndose en puntos comunes de doctrina, influyan sobre el estado para que imponga los decretos y las instituciones de ellas, entonces la América protestante habrá formado una imagen de la jerarquía romana, y la inflicción de penas civiles contra los disidentes vendrá de por sí sola.” El Conflicto de los Siglos, pág.498.

El movimiento ecuménico comenzó al involucrar a las iglesias protestantes en proyectos sociales y guerras culturales para resolver dilemas que eran comunes tanto para los católicos romanos como para los protestantes. Estos dilemas incluían el aborto y la “libertad religiosa” en el mercado, especialmente a la luz de los problemas de igualdad LGBTQ+.

El movimiento ecuménico fue el medio para reducir las objeciones a Roma. Después de todo, ¿cómo podrían los protestantes objetar a Roma cuando trabajaban juntos en las «trincheras»? ¿Cómo podrían oponerse a la participación de Roma en la política estadounidense cuando las guerras culturales fueron fuertemente políticas? Los protestantes comenzaron a ver a Roma como un aliado muy importante al tratar con un Estados Unidos cada vez más secular.

Gradualmente los protestantes fueron inducidos a pensar que la Iglesia Católica Romana había cambiado y que ya no tenía una agenda hostil hacia ellos. Roma fue amistosa con todos y creyeron en ello. De hecho, como la mayoría de los protestantes guardan el domingo simpatizan fundamentalmente con Roma.

Al poco tiempo Roma comenzó a invitarlos a discutir la doctrina con ella. Y la justificación por la fe se convirtió en el tema candente entre los que dialogaban con Roma. Roma modificó la redacción de su catecismo para que los protestantes lo aceptaran, pero no ha cambiado sus doctrinas centrales de penitencia, peregrinación, mariología, indulgencias o incluso la salvación.

Los protestantes están entusiasmados con la colaboración de Roma. Están entusiasmados con el progreso de las discusiones doctrinales, pero están dispuestos a creer más de lo que Roma realmente ha hecho con sus ajustes. No ven que Roma es como un camaleón. Pero, ¿notaron esa parte en la cita sobre «las doctrinas que tienen en común con ellas»? ¡Ahí es donde comienza el movimiento ecuménico! Se centra en los puntos de acuerdo y eso atrae a los protestantes. Hablaremos más sobre esto más adelante.

“El papado es precisamente lo que la profecía declaró que sería: la apostasía de los postreros días. (2 Tesalonicenses 2:3, 4.) Forma parte de su política asumir el carácter que le permita realizar mejor sus fines; pero bajo la apariencia variable del camaleón oculta el mismo veneno de la serpiente… ¿Será posible que este poder cuya historia se escribió durante mil años con la sangre de los santos, sea ahora reconocido como parte de la iglesia de Cristo?” El Conflicto de los Siglos, pág. 628.

Pero eso es exactamente lo que está sucediendo. Ahora los protestantes ven a Roma con mucho favor. Y si alguien se opone se le acusa de ser un fanático. Escuchen esto:

“Los protestantes consideran hoy al romanismo con más favor que años atrás. En los países donde no predomina y donde los partidarios del papa siguen una política de conciliación para ganar influjo,…” El Conflicto de los Siglos, pág. 619.

Esta declaración es muy reveladora y señala claramente hacia dónde se dirige Roma. Piensen, esto fue escrito mucho antes de que Roma sancionara oficialmente el movimiento ecuménico. El punto es que Roma ha estado en esto mucho más tiempo que el Vaticano II. Voy a seguir leyendo.

“…se nota una indiferencia creciente respecto a las doctrinas que separan a las iglesias reformadas de la jerarquía papal; entre los protestantes está ganando terreno la opinión de que, al fin y al cabo, en los puntos vitales las divergencias no son tan grandes como se suponía, y que unas pequeñas concesiones de su parte los pondrían en mejor inteligencia con Roma.” El Conflicto de los Siglos, pág. 619.

Entonces, ¿quién está haciendo la concesión? En la comprensión fundamental de la salvación son los protestantes, no los católicos. Los protestantes están listos para ceder sus principios doctrinales para tener comunión con los católicos. Esto llevará a la pérdida de la libertad, no para aquellos que cumplen con las leyes dominicales de Roma, sino para aquellos que guardan el sábado bíblico. Los protestantes no ven que para mantener la libertad, necesitan defender incluso al grupo más pequeño de personas cuyas libertades están en la minoría. Sigo leyendo:

“Tiempo hubo en que los protestantes estimaban altamente la libertad de conciencia adquirida a costa de tantos sacrificios. Enseñaban a sus hijos a tener en aborrecimiento al papado y sostenían que tratar de congeniar con Roma equivaldría a traicionar la causa de Dios. Pero ¡cuán diferentes son los sentimientos expresados hoy!” El Conflicto de los Siglos, pág. 619.

Ahora trabajan juntos. Ahora colaboran en todo tipo de proyectos sociales, pero incluso han estado cooperando en los servicios de la iglesia y los rituales católicos, como la Cuaresma.

Estimados, aquí hay un versículo bíblico que revela lo que está sucediendo en nuestro tiempo. Roma es verdaderamente el líder en la apostasía de los últimos tiempos.

“Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.” 2ª Tesalonicenses 2:3,4.

Roma prácticamente cayó desde el principio, pero los protestantes ahora se están alejando. Lo que hizo Martín Lutero; lo que hizo Juan Calvino; y lo que hicieron los metodistas ahora está siendo arrastrado por el nuevo fanatismo para reunirse y tener comunión con Roma. Estos hombres se habrían opuesto a este movimiento con cada tendón de sus cuerpos.

Pero piensen al respecto. Es muy halagador para un líder de una mega iglesia como Rick Warren, ser invitado al Vaticano para presentar un documento sobre la vida familiar. Es halagador para alguien como Kenneth Copeland ser invitado por el Papa para viajar a Roma junto con algunos otros Pentecostales y tener una reunión de tres horas y media con el Papa Francisco. A nadie se le concede tanto tiempo con el Papa. Nadie fuera de la jerarquía romana almuerza con el Papa en el Vaticano.

El movimiento ecuménico ha jugado con la inseguridad de las iglesias protestantes acerca de la enseñanza de la verdad bíblica sobre la Iglesia católica. Entonces ya no la predican. La dinámica entre las iglesias protestantes ha cambiado y ahora todos quieren hacerse amigos de Roma.

El movimiento ecuménico incluso suaviza el impacto del escándalo sexual global. Los evangélicos no están tan preocupados por esto por sus propias razones, incluida la necesidad de que Roma les ayude con las guerras culturales. Son los secularistas los que han estado exponiendo la corrupción de Roma y tratando de desacreditar al Papa, al papado y a la jerarquía. ¿Por qué? Para que Roma sea débil en su esfuerzo para oponerse a sus problemas de estilo de vida. No quieren que se escuche la voz religiosa de Roma en la guerra por el aborto y la libertad religiosa, entre otras cosas. No quieren que se escuche la voz de Roma cuando se inclina y aprieta para imponer una ley dominical. Después de todo, ¿cómo puede Roma presionar por una ley dominical cuando ella tiene estos escándalos vergonzosos girando a su alrededor?

Por ello Roma tiene que limpiar sus actos. Tiene que hacer las paces donde pueda, tiene que disculparse por sus pecados y corrupciones y lo está haciendo. Sus disculpas tienen un impacto ecuménico, porque los protestantes pueden decir: “Bueno, Roma es humilde; ella se disculpó por eso. No necesitamos discutir esto con ella”. Esta situación también dificultará que aquellos que transmiten el mensaje de los tres ángeles expongan a Roma, porque los protestantes harán excusas a favor de ella.

Como hemos visto, el movimiento ecuménico es realmente importante. Es parte de la apostasía del fin de los tiempos que está sanando la herida mortal. Pablo dijo que la venida de Cristo no podía suceder en sus días porque la gran apostasía debía venir primero. ¿Qué mayor apostasía podría haber para una iglesia global que dice seguir a Cristo o actuar en nombre de Cristo y realmente adorar y tratar de forzar la adoración a Satanás? Eso es exactamente de lo que Pablo está hablando. El hombre de pecado es un gobernante apóstata que preside a las personas religiosas, pero que realmente es un representante de Satanás. Como pueden ver, a Satanás se le debe dar la oportunidad de manifestarse a gran escala para que los problemas en la gran controversia entre Cristo y Satanás sean madurados y resueltos. Se le debe permitir que demuestre sus principios de pecado. Y una forma en que lo hace es fingiendo ser Cristo y engañando a las personas para que lo sigan como si fuera Cristo. El apóstol Juan en Apocalipsis 13: 3, 4 también dice que cuando la herida mortal de Roma sea sanada, el mundo adorará al dragón y la bestia.

La apostasía incluye muchas cosas. Implica apostasía moral, apostasía doctrinal. Implica buscar la ayuda del gobierno civil para forzar sus dogmas sobre la gente. Esta es la obra del hombre de pecado. El hombre de pecado echa por tierra la verdadera adoración, de modo que en lugar de adorar a Cristo, la gente adora a Satanás. Se trata de un sistema de control espiritual conocido como formación espiritual. Implica la destrucción del hogar y la familia. Se trata de crímenes morales repugnantes. Implica el espiritismo, en el que se considera que los muertos están vivos y en el cielo, se comunican con nosotros o interceden por nosotros con Cristo, y estas cosas están condenadas por las Escrituras porque fueron creadas por Satanás. Esta apostasía representa un sistema de enseñanza y adoración, que involucra influencias satánicas engañosas como el miedo, para evitar que las personas tengan un verdadero entendimiento de Dios y de la salvación.

Pero la apostasía no es solo un retroceso en una escala individual. No es solo un pecado personal, sino también un pecado corporativo que involucra a muchas naciones o iglesias entre las naciones. Es un sistema masivo de engaño que necesariamente involucra también al mundo geopolítico. Implica dinero, finanzas y política global, así como rituales y ceremonias sin vida. Implica el revestimiento de hermosas iglesias y catedrales, velas, penitencia, peregrinaciones, indulgencias por el pecado y un montón de otros desperdicios sin valor que están diseñados para mantener a las personas bajo control espiritual.

Cuando una iglesia no puede confiar en el poder de Dios, debe recurrir al poder terrenal. Entonces esta iglesia apóstata apela al estado, o a las naciones del mundo para que le ayuden a resucitar su fuerza y poder. Ella apela a los reyes y gobernantes para que la ayuden a restaurar su antiguo control sobre la sociedad. Y esto está sucediendo muy efectivamente ante nuestros ojos. De hecho, los protestantes, o evangélicos como les gusta que se los llame, no protestarán, porque Roma les ayuda con cosas que son importantes para ellos en las guerras culturales.

Ahora, me gustaría que piensen en dónde estamos en el transcurso del tiempo a la luz del movimiento ecuménico. El mundo ha pasado varios puntos de inflexión irreversibles. Todo esto se requiere como parte de los principios del tiempo del fin que se desarrollarán en nuestros días. De hecho, se están desarrollando en este momento.

¿Qué es un punto de inflexión? Un punto de inflexión es el punto en el que un problema cruza un cierto umbral y gana un impulso significativo. A menudo se desencadena por algún evento menor o desarrollo que lo empuja rápidamente. Una vez que se alcanza el punto de inflexión, no hay vuelta atrás. Es irreversible. Puede que aún haya retrasos y complicaciones para alcanzar los objetivos finales del programa, pero el progreso continúa. Recuerden que antes de alcanzar un punto de inflexión en un tema determinado, aquellos que están trabajando para lograr sus objetivos permanecen en silencio. Trabajan de forma silenciosa y sigilosa hasta que ven que se ha alcanzado el punto de inflexión. Luego salen al descubierto, porque saben que nada puede impedirles alcanzar sus metas tarde o temprano.

He observado las señales de los tiempos durante muchos años. Observo que hemos alcanzado varios puntos de inflexión a la vez en nuestra vida. Siempre he mirado hacia el futuro para ver como estas cosas se cumplirían. Y me preguntaba cómo se desarrollarían las predicciones de la Biblia de manera práctica. Pero ahora veo que silenciosamente, sigilosamente, astutamente, la política y la economía de esta tierra se están alineando con el poder de Satanás y él está construyendo los elementos necesarios para que las profecías de los últimos tiempos se cumplan en cada detalle. Estas señales ya no son futuras. Estamos a punto de completar el conjunto completo de dispositivos que se requieren para que Satanás gobierne el mundo a través de su iglesia en la tierra.

Los ángeles que retienen los cuatro vientos en la tierra deben permitir un progreso bastante rápido en este momento. Deben entender que el tiempo de gracia en esta tierra es limitado y que los asuntos deben desarrollarse para que todos puedan ver los propósitos de Satanás y sus secuaces y tomar una decisión a conciencia. Ellos ven que algunas almas preciosas están siendo selladas al vencer todos sus pecados en Cristo.

Creo que vale la pena que notemos los puntos de inflexión que han alcanzado el punto de no retorno, para que podamos entender el papel del movimiento ecuménico.

Primero está el punto de inflexión de la globalización. Ya no es una teoría de la conspiración porque ahora está a la vista. Cada día, cada semana, las noticias están llenas de globalización o de sus consecuencias. A los globalistas no les gusta el Sr. Trump porque está trabajando en contra de sus principios. Pero eso solo durará un tiempo. De hecho, lo que el Sr. Trump logre será utilizado por los globalistas en su agenda. Sin la globalización no se puede tener una ley dominical universal. Sin un sistema global de gobierno; sin un sistema económico global; y sin un mecanismo de aplicación global, no puede suceder. Bueno, ahora está ocurriendo la globalización y Roma está justo en el medio. La globalización conduce a la centralización del poder político, económico y educativo, así como de otras maneras. Esta consolidación y centralización implica la redistribución de la riqueza y la digitalización de la moneda. Implica vigilancia masiva y prevención del cambio climático. Está todo allí.

El segundo punto de inflexión es la influencia jesuita en el liderazgo del mundo. Es fenomenal. Los jesuitas capacitan a muchos, si no a la mayoría de los líderes políticos, jueces y líderes empresariales, generación por generación. Los guían y luego trabajan con ellos mientras están en el cargo. Incluso Donald Trump tuvo alguna educación en una escuela jesuita en Nueva York.

Actualmente las opciones del Sr. Trump para designar a los jueces federales están siendo guiadas por Leonard Leo, un abogado y católico romano comprometido que ha dedicado muchos años de su vida a construir una infraestructura nacional de abogados, jueces y líderes empresariales que buscan fomentar la aplicación de los principios fundadores de nuestra nación, promoviendo así un gobierno constitucional limitado. Está seleccionando a los jueces del Sr. Trump tanto para la Corte Suprema como para la banca federal. Muchos de estos jueces son católicos romanos y algunos de ellos han sido capacitados en escuelas jesuitas. Por lo tanto, los esfuerzos de Leo eventualmente socavarán las libertades religiosas consagradas en la Constitución de los Estados Unidos y los principios que pretende defender. Aquí hay un punto que debe mencionarse. Roma incluso ha aprendido cómo incorporarse a un gobierno limitado y a la libertad religiosa para desarrollar su poder.

Escuchen esta declaración de El Conflicto de los Siglos, pág. 622.

“Los protestantes se han entremetido con el papado y lo han patrocinado; han hecho transigencias y concesiones que sorprenden a los mismos papistas y les resultan incomprensibles. Los hombres cierran los ojos ante el verdadero carácter del romanismo, ante los peligros que hay que temer de su supremacía.”

Creo que hemos llegado a un punto de inflexión con respecto al ascenso de los jesuitas a la prominencia política. Y con un jesuita muy popular en la oficina papal, es inevitable que la formación jesuita lleve a más individuos de este tipo a la prominencia política. Los jesuitas ya no esconden su actividad, ya no temen ser vistos públicamente, políticamente, económicamente y de cualquier otra forma.

Un tercer punto de inflexión es el impulso dramático que ha logrado el movimiento por los derechos de los homosexuales. El matrimonio entre personas del mismo sexo se ha apoderado del escenario central del cambio social en casi todas partes en las sociedades occidentales, así como en algunas otras grandes naciones. Los derechos de los homosexuales se han convertido en un lugar prominente después de años de inversión y planificación estratégica por parte de los activistas. Una ley tras otra que defendía el matrimonio tradicional se ha derrumbado en naciones de todo el mundo. Los tribunales aceptaron definiciones reformuladas de estilo de vida y matrimonio y han eliminado leyes que se interponen en el camino de la agenda gay.

Los días de Lot han llegado sobre nosotros. Los hombres de la ciudad están rodeando la casa legal de las naciones occidentales, y si se les permite hacerlo la derribarán. Y puede que les sea permitido, porque Jesús mismo dijo:

Asimismo como sucedió en los días de Lot;… Así será el día en que el Hijo del Hombre se manifieste. Lucas 17: 28,30.

Otro punto de inflexión es la destrucción de las constituciones occidentales, especialmente la de los Estados Unidos. Antes de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, la Constitución de los Estados Unidos tenía cierta sustancia. Ahora no es más que una cáscara, que ha sido despojada cada vez más de su significado. Los jueces, los legisladores y los presidentes hacen lo que quieren, independientemente de la Constitución.

El resultado ha sido un contragolpe, personificado por el Sr. Trump. Con un senado republicano, está tratando de hacer algo por la pérdida de autoridad de la Constitución, al menos a nivel judicial. Él y sus asesores evangélicos saben que no pueden lograr un gobierno constitucional limitado a través de una revolución política; es demasiado vulnerable a los cambios políticos. Sin embargo, el Sr. Trump heredó una oportunidad sin precedentes para sentar a muchos nuevos jueces en la banca federal (debido a la negativa de los republicanos permitirle a Obama nombrar jueces durante los últimos dos años de su presidencia). Y está aprovechando esta oportunidad para cambiar la forma en que los estadounidenses piensan acerca de su constitución. Esto tendrá un efecto a largo plazo.

Estos jueces están siendo examinados por Leonard Leo, un conservador católico romano, quien como mencioné anteriormente, está recorriendo el país en busca de jueces que tengan opiniones constitucionalistas sólidas. De esta manera el Sr. Trump se ha propuesto cambiar el poder judicial de los Estados Unidos y nombrar jueces ideológicamente conservadores que harán que la nación retorne a sus fundamentos conservadores y obligará a la legislatura a promulgar leyes que respalden la cultura conservadora.

Por ejemplo, una vez que los tribunales federales estén completos con jueces conservadores, un fallo a favor del aborto que se entrega a un tribunal local inferior, puede ser fácilmente anulado. Eso significaría que el tribunal liberal inferior tendría que ser mucho más cuidadoso en la forma en que aborda sus casos si quiere que se los defienda ante un tribunal superior.

Pero hay otro movimiento que ha alcanzado un punto de inflexión.

Con el 500° aniversario de las 95 tesis de Martín Lutero, el movimiento ecuménico ha destruido casi todo lo que queda del protestantismo. El protestantismo primero fue neutralizado y ahora está siendo completamente derrocado. Nuevamente las iglesias, especialmente las iglesias evangélicas, son vulnerables porque no han seguido la Biblia, aunque creen que son iglesias bíblicas. Por el hecho de que la mayoría de las iglesias guardan el domingo, que es una institución católica romana, muestran que son vulnerables a los argumentos engañosos de Roma. ¡Y son siempre vulnerables!

La meta final de Roma es la unidad sacramental, visible y plena con las otras iglesias. Si ella logrará esto antes del fin de los tiempos está por verse. Sin embargo, Roma ahora tiene el respeto de las iglesias evangélicas y de la corriente principal. Ella tiene el respeto de las iglesias ortodoxas, las iglesias protestantes e incluso muchos de la iglesia Adventista del Séptimo Día.

El camino para alcanzar ese nivel de unidad implica muchos debates y acuerdos con iglesias protestantes o evangélicas. Implica la aceptación de los bautismos de ambos lados, la aceptación de la liturgia de cada uno, y en última instancia, la aceptación de la mesa de comunión de cada uno. Implica el intercambio de púlpitos entre los católicos y las otras iglesias. Implica la colaboración en asuntos políticos, sociales y religiosos. Se trata del Consejo Mundial de Iglesias. Implica iniciativas de paz, iniciativas de reversión del cambio climático y colaboración en otras creencias fundamentales que son comunes a todos o la mayoría de ellos. Tengan en cuenta que la única creencia común a prácticamente todos ellos es la adoración del domingo. Entonces, cuando se hayan unido en todas las otras áreas importantes, también se reunirán en la adoración del domingo. Y esto se volverá muy político, no solo religioso.

Por ejemplo, el presidente Trump ha llevado a muchos evangélicos a una consulta privada con él mismo sobre asuntos políticos y sociales, dándoles mucho poder e influencia. Por lo tanto, bastante a menudo suena como un evangélico. ¿Qué les ha pasado a los católicos romanos que estaban inundando todo el gobierno de Bush?

Los católicos romanos todavía están involucrados, pero no tan abiertamente en este momento. Se han retirado para permitir que los evangélicos hagan su trabajo, porque saben que los estadounidenses se relacionan mejor con los líderes evangélicos que con los líderes papales. Los evangélicos están trabajando para dar forma a las políticas de la Casa Blanca; pero no se equivoquen, los obispos los están guiando detrás de las escenas. Se les aconseja qué batallas políticas emprender y qué batallas evitar.

Los obispos también saben que ha ocurrido un gran cambio en los evangélicos, haciéndolos mucho más dispuestos al compromiso político. En la década de 1980, cuando comenzó la Mayoría Moral, fue de corta duración en realidad. No duró mucho porque los evangélicos no estaban en unidad. Tenían tantas diferencias doctrinales que no podían encontrar puntos en común para trabajar juntos.

Sin embargo, han aprendido algo del movimiento ecuménico católico romano que es muy importante. Han aprendido a dejar de lado sus diferencias doctrinales para que puedan trabajar juntos y lograr ciertos objetivos comunes. Ahora no solo los católicos y los evangélicos trabajan juntos, sino que los evangélicos también trabajan juntos entre sí.

Este movimiento lleva a la depreciación de las cosas distintivas y no deja más que ceremonia. La autoridad bíblica es reemplazada por la autoridad humana, particularmente la del Papa. Como resultado, dar el último mensaje de advertencia de Dios a un mundo perdido y caído será cada vez más difícil.

Hay una cosa más sobre la que tenemos que pensar. El enemigo ha apuntado a la iglesia de Dios. El movimiento ecuménico tiene muchos objetivos, pero en el fondo, debajo de todos ellos está su objetivo final contra el mensaje de los tres ángeles y aquellos que sostienen estos mensajes. Roma sabe esto. El enemigo sabe esto. De hecho, el enemigo ha creado el movimiento ecuménico para poner de su lado a todo el mundo y en contra de unas pocas personas fieles que guardan el sábado que son el remanente de la profecía bíblica. Él está haciendo la guerra contra ellos de una manera sutil. Y a medida que el movimiento ecuménico influye en todo el mundo, muchos del pueblo de Dios se verán envueltos y serán arrastrados al seno de Roma.

Amigos, este no es el momento de comprometerse con Roma. Es hora de oponerse a sus enseñanzas. Los que lo hagan serán honrados de Dios.

Pero la iglesia remanente de Dios está siendo arrastrada hacia el ecumenismo. Muchos eventos ecuménicos se han convertido en parte de las actividades principales del Departamento de Libertad Religiosa de la Conferencia General y sin duda en otros niveles. Estimados, esto no va a terminar bien. Nos enfrentamos a un enemigo que tiene muchos más recursos que nosotros. Él tiene mucha más influencia y poder que nosotros. Y él está cambiando la dinámica social para que nos veamos atraídos y no podamos escapar de la trampa descrita en el libro El Conflicto de los Siglos.

“La Palabra de Dios ha dado advertencias respecto a tan inminente peligro; descuide estos avisos y el mundo protestante sabrá cuáles son los verdaderos propósitos de Roma, pero ya será tarde para salir de la trampa. Roma está aumentando sigilosamente su poder. Sus doctrinas están ejerciendo su influencia en las cámaras legislativas, en las iglesias y en los corazones de los hombres. Ya está levantando sus soberbios e imponentes edificios en cuyos secretos recintos reanudará sus antiguas persecuciones. Está acumulando ocultamente sus fuerzas y sin despertar sospechas para alcanzar sus propios fines y para dar el golpe en su debido tiempo. Todo lo que Roma desea es asegurarse alguna ventaja, y ésta ya le ha sido concedida. Pronto veremos y palparemos los propósitos del romanismo. Cualquiera que crea u obedezca a la Palabra de Dios incurrirá en oprobio y persecución.” El Conflicto de los Siglos, pág. 638.

Amigos, la Biblia nos instruye a salir, no a acercarnos. Apocalipsis 18: 4 dice:

“Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas;”

Y aquí hay un verso más que enfatiza este punto. Cuando Dios dice «sal», sabe que si no lo hacemos, nos veremos envueltos en una red de engaños que nos llevará a nuestra ruina eterna.

“Salid de Babilonia, huid de entre los caldeos; dad nuevas de esto con voz de alegría, publicadlo, llevadlo hasta lo postrero de la tierra; decid: Redimió Jehová a Jacob su siervo.” Isaías 48:20

Tu redención depende de tu obediencia a Dios, amigo mío. Esto no es salvación por obras. Es evitar la destrucción que terminará con Roma y con todos los que están vinculados a ella.

Puedes pensar que las cosas seguirán como siempre lo han hecho. Puedes pensar como en los días de Noé, que no habrá cambio. Pero escucha esta voz persistente que te llama al arrepentimiento.

Antes de terminar, quiero decir que los puntos de inflexión de los que hemos hablado anteriormente apuntan en una dirección. Ellos están apuntando hacia los juicios de Dios. Ninguno de ellos está en armonía con el cielo. Todos ellos merecen el castigo divino. Y las ciudades están en medio de todo. Si vives en una ciudad, es hora de descubrir cómo salir.

“Se me pide que declare el mensaje de que las ciudades llenas de transgresión y pecaminosas en extremo, serán destruidas por terremotos, incendios e inundaciones.” -Ev 24 (Abril 27, 1906). Eventos de los Últimos Días, pág. 118.

“Las ciudades de las naciones serán tratadas con estrictez, y sin embargo, no serán visitadas con la extrema indignación de Dios, porque algunas almas renunciarán a los engaños del enemigo, y se arrepentirán y convertirán.”-Ev 25 (1906). Eventos de los Últimos Días pág.120.

Pueden pensar que las ciudades ya han sido tratadas estrictamente. Pero permítanme simplemente mencionar dos declaraciones más para ayudarlos a ver que aún no hemos visto la plenitud de los juicios de Dios.

“Pronto habrá un cambio repentino en los tratos de Dios. El mundo en su perversidad está siendo visitado por muertes, por inundaciones, tormentas, incendios, terremotos, hambrunas, guerras y derramamiento de sangre. … ¡Oh, para que los hombres entiendan la paciencia y la longanimidad de Dios! Él está restringiendo sus propios atributos. Su poder omnipotente está bajo el control de la omnipotencia. ¡Oh, que los hombres entiendan que Dios se niega a cansarse con la perversidad del mundo, y aún mantiene la esperanza de perdón incluso a los más indignos! Pero su tolerancia no siempre continuará. ¿Quién está preparado para el cambio repentino que tendrá lugar en el trato de Dios con los hombres pecadores? ¿Quién estará preparado para escapar del castigo que ciertamente caerá sobre los transgresores?” Fundamentals of Christian Education, pág. 356.

Piensen en esta declaración asombrosa por un minuto. El mundo ya está siendo visitado por inundaciones, tormentas, incendios, terremotos, hambrunas, guerras y derramamiento de sangre. Entonces, al menos en el nivel actual, no son este cambio repentino. Las visitas que vemos ahora son solo advertencias. Son una pequeña muestra de qué esperar cuando Dios cambie repentinamente sus relaciones con la humanidad perversa.

Comparen esta declaración con esta otra de Eventos de los Últimos Días, pág.114.

“El fin está cerca y cada ciudad va a ser trastornada de diferentes maneras. Habrá confusión en cada ciudad. Todo lo que puede ser sacudido lo será, y no sabe qué pasará luego. Los juicios serán de acuerdo con maldad de la gente y la luz de verdad que han tenido.” 1MR 248 (1902)

¿Escucharon eso de que todas las ciudades serán trastornadas? Son muchas las ciudades y muchas personas que se verán afectadas.

“¡Ojalá que el pueblo de Dios tuviera una noción de destrucción inminente de millares de ciudades, ahora casi [totalmente] entregadas a la idolatría!”-Ev 26 (1903) Eventos de los Últimos Días, pág.114.

¿Miles de ciudades? Eso son cientos de millones de personas.

“Falta poco para que las grandes ciudades sean barridas, de manera que todos deben ser amonestados acerca de la inminencia de estas calamidades.”-Ev 26 (1910) Eventos de los Últimos Días, pág. 114.

Entonces, ¿qué tienen que ver las ciudades con el ecumenismo? Es en las ciudades donde se encuentran las mega iglesias. Es allí donde los obispos tienen mucha más influencia y donde el movimiento ecuménico se está consolidando. Por lo tanto, es en las ciudades donde caerán los juicios de Dios.

Mis amigos, estamos cerca del final. Los principales desarrollos se están produciendo de manera gradual, silenciosa y sigilosa. No tenemos tiempo que perder. Debemos prepararnos ahora.

Oremos. Padre nuestro que estás en los cielos, ayúdanos a comprender que el movimiento ecuménico no es un amigo de la verdad. No es un amigo de la justicia, aunque pueda parecer piadoso e incluso divino. Ayúdenos a darnos cuenta de que nuestro deber es advertir al pueblo de Dios dondequiera que esté, que deben salir de Babilonia y no acercarse a ella. Por favor, envíanos tu Espíritu Santo para que podamos ser vencedores y para que Jesús tenga la libertad de derramar Su Espíritu Santo en nuestras vidas en el poder de la lluvia tardía. Ayúdenos a ser más versados en las Escrituras y a estar preparados para la crisis y la Segunda Venida. En el nombre de Jesús, amén.