El domingo 27 de agosto la policía detuvo a 13 violentos activistas antifascistas en Berkeley. Los cargos incluyen asalto con arma mortal, agresión criminal y varias violaciones del código municipal.
Los agitadores «antifascistas» y otros izquierdistas superaron con creces al grupo de cristianos conservadores y partidarios de Trump que participaban en una vigilia de oración y una manifestación para el «No al Marxismo». Los activistas se apoderaron del parque Martin Luther King Jr. ubicado cerca del campus de la Universidad de California en Berkeley y golpearon a varios de los manifestantes antimarxistas. Un oficial resultó herido mientras hacía un arresto, y varias personas fueron golpeadas con tarros de pintura y botellas.
El diario San Francisco Chronicle, que tenía reporteros en la escena, se refirió a la multitud de antifascistas como anarquistas: «Los enmascarados que estaban en contra de la protesta, a menudo denominados antifascistas, superaban en gran medida a las personas que habían venido para la manifestación, muchos de los cuales llevaban ropa roja indicando el apoyo al Presidente Trump. Los anarquistas persiguieron a los derechistas, y hubo un caso en que cuatro o cinco golpearon a un hombre con puños y palos antes de que un presentador de radio para Reveal, Al Letson, saltara para proteger a la víctima. Los anarquistas también atacaron a los periodistas que documentaban sus acciones».
Clare López, vicepresidenta de investigación y análisis del Centro para la Política de Seguridad, dijo que las imágenes revelan que la gente detrás de las máscaras antifascistas eran en su mayoría agitadores profesionales, no estudiantes universitarios locales. «Con una edad promedio de 30 años, los arrestados durante los violentos disturbios en Berkeley del domingo 27 de agosto no encajan en el perfil de estudiantes universitarios de nivel medio», dijo López.
«De hecho, encajan más estrechamente con el perfil de matones profesionales fuera del campus», dijo. «Una vez que entendamos que los antifascistas son una colección heterogénea de anarquistas marxistas-leninistas, descendientes directos de los combatientes comunistas de la calle de los años 1920 y 1930 en Europa, estaremos mejor preparados para darnos cuenta del por qué estos matones atacaron tan violentamente la manifestación de ‘No al marxismo’. Los antifascistas estaban allí para defender el comunismo y causar el caos en los Estados Unidos».
El grito de guerra de los antifascistas, capturado en video durante la manifestación, no es nada menos que la destrucción total de la sociedad estadounidense. Ellos cantaron: «¡No Trump, No Muro, Ningún Estados Unidos!».
«Al mismo tiempo la anarquía trata de hacer desaparecer toda ley, no solo divina sino humana. La centralización de la riqueza y el poder, las vastas combinaciones hechas para el enriquecimiento de unos pocos a expensas de la mayoría; la unión de las clases más pobres para organizar la defensa de sus intereses y derechos; el espíritu de inquietud, desorden y derramamiento de sangre; la propagación mundial de las mismas enseñanzas que produjeron la Revolución francesa, tienden a envolver al mundo entero en una lucha similar a la que convulsionó a Francia». Maranata, El Señor Viene, pág. 151.
Source References
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Black-clad antifa members attack peaceful right-wing demonstrators in Berkeley [1]
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Masked anarchists violently rout right-wing demonstrators in Berkeley [2]
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Antifa Chants At Berkeley: “No Trump, No Wall, No USA At All” [3]
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5 assaulted at Berkeley protests as black-clad anarchists storm rightwing rally [4]
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Are they paid to do it? Some of the Violent «ANTIFA» Blackclad & Masked Protest Terrorists? [5]