The Age: Hombres armados entraron violentamente en un hotel y complejo de oficinas en la capital de Kenia, matando al menos a siete personas, obligando a los trabajadores a meterse debajo de los escritorios y dejando partes de cuerpos esparcidas en la calle.
El ataque hizo que la gente huyera en pánico mientras las explosiones y los disparos de armas pesadas resonaban en el complejo el martes. Un testigo dijo que vio cinco cuerpos solamente en la entrada.
Al-Shabab, el grupo islámico con sede en Somalia…, se adjudicó el atentado.
«Es terrible. Lo que he visto es terrible», dijo Charles Njenga, quien huyó de una escena de sangre, vidrios rotos, vehículos en llamas y columnas de humo negro.
«La puerta principal del hotel se abrió de golpe y había un brazo humano en la calle cortado desde el hombro», dijo Serge Medic, el propietario suizo de una compañía de seguridad que corrió a la escena para ayudarlo cuando su taxista le comentó del ataque.
El asalto coordinado comenzó con una explosión que apuntó a tres vehículos afuera de un banco y un atentado suicida en el vestíbulo del hotel que hirió gravemente a varios invitados, dijo el jefe de la policía nacional de Kenia, Joseph Boinnet.
Los sobrevivientes dijeron haber escuchado una explosión devastadora y vieron a personas ser abatidas por hombres armados mientras estaban sentadas en un café. Las víctimas fueron dejadas acostadas en mesas, sangrando.
«Estábamos cambiando de turnos y fue entonces cuando escuché una fuerte explosión y la gente gritaba», dijo Enoch Kibet, quien trabaja en limpieza en el café y logró salir por la puerta del sótano. «No podía creer que estuviera vivo. La explosión fue tan fuerte que sacudió todo el complejo».
Las autoridades enviaron fuerzas especiales al hotel que está cerca del consulado de Australia, para expulsar a los hombres armados que se cree que están escondidos en el interior.
Tarde en la noche, el Ministro del Interior de Kenia dijo que «la situación está bajo control» y que todos los edificios estaban seguros después del ataque mortal.
No estaba claro cuántos eran los atacantes al complejo, que incluye el hotel DusitD2, junto con bares, restaurantes, bancos y oficinas, y se encuentra en un barrio acomodado con un gran número de expatriados estadounidenses, europeos e indios.
Un oficial de policía que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado para hablar con los medios de comunicación dijo que se habían visto cadáveres en los restaurantes de la planta baja y en las oficinas de la planta superior, pero «no hubo tiempo para contar a los muertos».
Además, un testigo que dio su nombre solo cuando Ken dijo que vio cinco cuerpos en la entrada, dijo que otras personas gritaban pidiendo ayuda y «cuando nos apresuramos a tratar de rescatarlos, empezaron a disparar desde el piso de arriba, y tuvimos que agacharnos porque estaban apuntándonos y pudimos ver a dos tipos disparando».
Los hospitales de Kenia hicieron un llamado a donaciones de sangre, aun cuando el número de heridos no estaba claro.
El video de Associated Press desde el interior del hotel mostraba a los agentes de seguridad de Kenia buscando en el edificio y los asustados trabajadores que salían de su escondite mientras aún se escuchaban los disparos. Algunas mujeres salieron por las ventanas. Un hombre se levantó del piso donde parecía estar tratando de esconderse debajo de un panel de madera y luego mostró su identificación.
Al igual que el ataque al centro comercial Westgate de al-Shabab, este apareció dirigido a los kenianos y extranjeros ricos que viven en el país. Se produjo un día después de que un magistrado dictaminó que tres hombres deben ser juzgados en relación con el ataque al Westgate Mall. Un cuarto sospechoso fue liberado por falta de evidencia.
Al-Shabab ha prometido represalias contra Kenia por enviar tropas a Somalia desde 2011. El grupo vinculado a Al Qaeda ha matado a cientos de personas en Kenia.
Un funcionario de inteligencia de Kenia dijo que el país había estado en alerta máxima desde noviembre, con información sobre posibles ataques a objetivos de alto perfil en Nairobi. El funcionario no estaba autorizado para hablar con los medios de comunicación y habló bajo condición de anonimato…
A pesar de los años de derramamiento de sangre, la frontera entre Kenia y Somalia sigue siendo permeable, y los extremistas de al-Shabab son capaces de sobornar fácilmente su paso por allí, según un panel de expertos de los Estados Unidos.
El complejo hotelero en el vecindario Westland de Nairobi está a unos dos kilómetros [del] Westgate Mall, en una calle relativamente tranquila y arbolada en lo que se considera una de las partes más seguras de la ciudad. El sitio web del hotel dice que está «envuelto en un refugio seguro y tranquilo lejos del ajetreo y el bullicio».
Nuestro Comentario:
La Biblia predice que habrá terrorismo en los últimos días. También predice que el pueblo de Dios que está en Cristo no tendrá temor.
Conexión Profética:
“No temerás el terror nocturno, Ni saeta que vuele de día,” Salmos 91:5.