Business Insider, por Yeji Jesse Lee: Los Estados Unidos se dirigen a un brote de coronavirus a nivel nacional.
Según datos recientes, los casos del virus COVID-19 están creciendo en grupos en ciudades de todo el país.
Los investigadores de la Universidad de Chicago encontraron grupos en estados como Arkansas, Misisipí, Tennessee, Georgia y Carolina del Sur, lugares que han sido ampliamente pasados por alto en comparación con epicentros como la ciudad de Nueva York o Seattle.
Los científicos del Centro de Ciencia de Datos Espaciales de la Universidad de Chicago (CSDS) examinaron los casos a nivel de condado para encontrar que había grupos significativos del virus en ciudades de todo el país.
En todo el país, ha habido más de 140.000 casos de COVID-19, y estados como Nueva York, Nueva Jersey y California han encabezado la lista con la mayoría de los casos. El número de casos está aumentando en otros lugares, desde Nueva Orleans a Filadelfia y Albany, Georgia.
El reciente pronóstico de Morgan Stanley COVID-19 publicado el lunes dijo que el mayor riesgo para los Estados Unidos es «una segunda ola de infecciones que surjan de la región central del país después de que las costas hayan alcanzado su punto máximo a mediados de abril.»
Esta ola, continúa el informe, podría retrasar el «pico» y causar la recontaminación de las ciudades costeras, incluso después de que vean disminuir los casos.
Scott Gottlieb, el ex comisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos, que ahora es miembro residente del American Enterprise Institute, dijo en Twitter que el coronavirus era ahora una «epidemia nacional con múltiples epicentros.»
Señalando ciudades como Nueva Orleans, Filadelfia y Dallas, entre otras, Gottlieb dijo que las ciudades de todo el país están viendo que los casos reportados se duplican cada tres o cuatro días.
En Filadelfia, que tenía 890 casos reportados de COVID-19 hasta el lunes por la mañana, los hospitales se preparan para lo peor, ya que los casos reportados del virus siguen aumentando.
«Anticipamos que no estamos a más de dos semanas detrás de la ciudad de Nueva York», dijo al Philadelphia Inquirer, P.J. Brennan, médico jefe del enorme Sistema de Salud de la Universidad de Pennsylvania. «Los casos se duplican cada dos o tres días. Anoche tuvimos 46 casos confirmados. Puedes hacer los cálculos.»
Y los hospitales de los Estados Unidos ya están enfrentando una gran presión sobre los recursos hospitalarios, o preparándose para la posibilidad de hacerlo en las próximas semanas.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, cuyo estado ha sido hasta ahora el más afectado por el coronavirus con más de 60.000 casos reportados, ha recurrido a sugerir que los hospitales del estado dividan los respiradores entre dos pacientes en medio de la actual escasez de máquinas.
La semana pasada, el Hospital Presbiteriano de Nueva York comenzó a hacer precisamente eso, a pesar de los riesgos involucrados.
«Ningún estado, ninguna área metropolitana se salvará», dijo la Coordinadora de Respuesta al Coronavirus de la Casa Blanca, Deborah Birx, a Chuck Todd de NBC News en «Meet the Press» el domingo. «Estamos pidiendo a todos los gobernadores y alcaldes que se preparen como Nueva York se está preparando ahora.»
Nuestro comentario:
Como se enfatiza en este artículo, el coronavirus está creciendo en grupos alrededor de las grandes ciudades. No es de extrañar que Dios haya animado a su pueblo a no vivir en las ciudades, ¡sobre todo en los últimos días!
Conexión Profética:
“El ambiente físico de las ciudades es muchas veces un peligro para la salud. La exposición constante al contagio, el aire viciado, el agua impura, el alimento adulterado, las viviendas obscuras, malsanas, y atestadas de seres humanos, son algunos de los muchos males con que se tropieza a cada paso.
No era el propósito de Dios que los hombres vivieran hacinados en las ciudades, confinados promiscuamente en estrechos alojamientos. Al principio Dios puso a nuestros primeros padres entre las bellezas naturales en medio de las cuales quisiera que nos deleitásemos hoy. Cuanto mejor armonicemos con el plan original de Dios, más fácil nos será asegurar la salud del cuerpo, de la mente y del alma.” El Ministerio de Curación, pág. 282.