En un fallo histórico sobre una cuestión profundamente polémica, el Tribunal Superior de Justicia dictaminó el jueves que las ventas de comestibles pueden permanecer abiertas durante el Shabat en Tel Aviv. La decisión tiene lugar luego de una lucha de una década contra la práctica entre los propietarios de pequeñas empresas y la autoridad municipal.
Los legisladores de Haredi (ultra ortodoxos) reaccionaron con furia ante el fallo, prometiendo introducir una legislación que lo anule e incluso le otorgue al Knesset la capacidad de anular los fallos de la Corte Suprema de manera más amplia.
El caso involucra una petición hecha por los propietarios de pequeños negocios contra un estatuto municipal de Tel Aviv aprobado en 2014, que solo entró en vigencia a principios de este año, permitiendo que 165 tiendas abrieran en la ciudad durante el Shabat. Algunos propietarios de negocios pequeños de comestibles se opusieron a la apertura de las grandes cadenas de supermercados durante el Shabat, diciendo que los obliga a abrir en su día de descanso con el fin de competir por los clientes que no están disponibles durante la semana.
Después de que sucesivos ministros del interior no aprobaron el estatuto, el Tribunal Supremo en abril de este año dictaminó que el gobierno debe permitir que entre en vigencia.
«El equilibrio no favorece una cosmovisión sobre la otra como tampoco resta valor al estado e importancia del Sábado como un bien nacional del pueblo judío y como uno de los valores de la nación de Israel como un estado judío y democrático», escribió el presidente saliente de la Corte Suprema, Miram Naor. «[Pero] al mismo tiempo que se protege el carácter especial del Shabat, se le debe permitir a cada individuo definir su Shabat de acuerdo a su propio entendimiento y creencias, y lo llene con el contenido que considere apropiado para sí mismo».
En respuesta al fallo, el ministro del Interior y presidente de Shas, Arye Deri, expresó que era «muy triste revelar que en Israel, el santo Sábado, por el cual los judíos a lo largo de las generaciones estuvieron dispuestos a entregar sus vidas, ha sido profanado y se ha convertido en una bandera y símbolo». Afirmó que ya había llegado a un acuerdo con el Primer Ministro Benjamín Netanyahu para avanzar rápidamente con dos proyectos de ley del gobierno, lo que le otorgaría al Ministro del Interior la autoridad requerida «para proteger el carácter público del sábado judío».
A fin de que se pueda promover la observancia del domingo globalmente, el enemigo debe depreciar el valor que tiene el sábado para los judíos. De este modo, estarán más dispuestos a cumplir con las leyes dominicales.
«Y todos los que moran en la tierra lo adorarán». Apocalipsis 13: 8.