9 Noticias, por Associated Press: Las lluvias excepcionales caídas el miércoles en una región del norte de Italia azotada por la sequía desbordaron los ríos, causaron la muerte de al menos ocho personas, obligaron a evacuar a miles de personas y llevaron a las autoridades a advertir que Italia necesita un plan nacional para combatir las inundaciones provocadas por el cambio climático.
Las intensas lluvias también obligaron a la Fórmula Uno a cancelar el Gran Premio de Emilia-Romaña de este fin de semana para no sobrecargar a los equipos de emergencia, que ya estaban al límite de su capacidad para responder a los ríos de lodo que han arrasado la región, causando estragos en infraestructuras y viviendas.
Días de tormentas se extendieron por una amplia franja del norte de Italia y los Balcanes, donde también se registraron inundaciones «apocalípticas», corrimientos de tierra y evacuaciones en Croacia, Bosnia y Eslovenia.
La vicepresidenta de Emilia-Romaña, Irene Priolo, dijo que ocho personas habían muerto y otras se encontraban en paradero desconocido en las inundaciones que obligaron a evacuar a más de 10.000 personas.
El Ministro italiano de Protección Civil, Nello Musumeci, pidió un nuevo plan nacional de ingeniería hidráulica para adaptarse al impacto de los crecientes incidentes de inundaciones y corrimientos de tierras.
En una reunión informativa, señaló que en la región había caído una media de 200 milímetros de lluvia en 36 horas, con algunas zonas registrando 500 milímetros en ese periodo.
«Si tenemos en cuenta que en esta región llueve una media de 1.000 milímetros al año, nos daremos cuenta del impacto que han tenido estas lluvias en estas horas», declaró Musumeci.
Citando el corrimiento de tierras ocurrido en Ischia en noviembre, en el que murieron una docena de personas, dijo que Italia experimenta cada vez más un clima tropical al estilo africano, con largos periodos de sequía interrumpidos por lluvias intensas que no pueden ser absorbidas por el suelo.
«Nada volverá a ser lo mismo… y lo que ha ocurrido en estas horas es una prueba de ello», afirmó Musumeci.
«Cuando el suelo permanece seco durante mucho tiempo, en lugar de aumentar su capacidad de absorción, acaba cementándose y permitiendo que las precipitaciones sigan fluyendo sobre la superficie y causando daños absolutamente inimaginables».
El alcalde de la ciudad de Cesena, Enzo Lattuca, publicó un vídeo a primera hora del miércoles en Facebook para advertir de que los continuos aguaceros en la región de Emilia-Romaña podrían desbordar el río Savio y otros afluentes menores por segundo día consecutivo.
Instó a los residentes a trasladarse a los pisos superiores de sus casas y evitar las zonas bajas y las orillas de los ríos.
Anunció el cierre al tráfico de algunos puentes y calles después de que ríos de barro inundaran sótanos y escaparates.
Musumeci dijo que 50.000 personas se habían quedado sin electricidad y más de 100.000 sin teléfono móvil ni fijo.
El jefe adjunto de la agencia de Protección Civil, Titti Postiglione, dijo que las operaciones de rescate para las personas que necesitaban evacuaciones de emergencia eran especialmente difíciles debido a que muchas carreteras y rutas estaban inundadas y el servicio telefónico interrumpido.
Algunas líneas de trenes regionales permanecían suspendidas el miércoles en torno a Bolonia y Rávena, con graves retrasos en otros lugares, según los ferrocarriles estatales italianos.
La Primera Ministra, Giorgia Meloni, que se encontraba de viaje en Japón para asistir a la reunión del G-7, declaró que el Gobierno seguía de cerca la situación y estaba dispuesto a aprobar ayuda de emergencia.
En los Balcanes, el crecido río Una inundó partes del norte de Croacia y el noroeste de Bosnia, donde las autoridades anunciaron el estado de emergencia. El alcalde de la ciudad de Bosanska Krupa, en Bosnia, dijo que cientos de casas se habían inundado.
«Tenemos un apocalipsis», declaró Amin Halitovic a la cadena regional N1.
«Ya no podemos contar los edificios inundados. Nunca había sido así».
En el este de Eslovenia se registraron decenas de corrimientos de tierra, muchos de los cuales pusieron en peligro viviendas e infraestructuras.
En Croacia, cientos de soldados y equipos de rescate siguieron llevando alimentos y otros artículos de primera necesidad a los habitantes de las zonas afectadas por las inundaciones que han quedado aislados en sus casas. De momento no se ha informado de víctimas.
Conexión Profética:
“Los juicios de Dios están ya en la tierra. Las guerras y los rumores de guerras, la destrucción causada por el fuego y la inundación, dicen claramente que el tiempo de angustia, que irá en aumento hasta el fin, está muy cerca. No tenemos tiempo que perder. El mundo está sacudido por el espíritu de la guerra. Las profecías del capítulo once de Daniel casi han alcanzado ya su cumplimiento final.” Maranatha, pág. 173.