El martes 20 de junio Donald Trump y Ben Carson, se reunieron con nada menos que 900 líderes conservadores cristianos en un evento restringido para los medios. Johnny Moore, portavoz de Mi Fe Vota (uno de los organizadores del evento) dijo antes de la reunión: “Será “la reunión más grande y representativa de líderes cristianos de la nación que yo haya visto en mi vida”. Entre los invitados se encuentran James Dobson, Ralph Reed, Penny Nance de Mujeres Preocupadas por América; Tim Wildmon de la Asociación de Familias Americanas; Tony Perkins del Concejo de Investigación de la Familia, el presidente de Valores Americanos, Gary Bauer y muchos pastores de mega iglesias. Además del bloqueo a los medios, se ha desplegado fuertes medidas de seguridad alrededor del Marriott Marquis en Nueva York.
El programa de un día de duración, titulado «Una conversación sobre el Futuro de América con Donald Trump y Ben Carson», le ha parecido a algunos como el primer vistazo de una posible fórmula presidencial del partido Republicano para el 2016.
«Muchos evangélicos no apoyaron a [Trump],» dijo Tony Perkins. «Pero hay muchos por ahí que creo que les gustaría, aunque hay cierta incertidumbre… Como evangélicos, y cristianos conservadores, en este proceso no sólo queremos tener influencia sino también dar testimonio de la verdad. Y parte de eso es pensar: ‘Muy bien, vamos a tener una conversación sobre estos temas. Tal vez usted no ha pensado como nosotros’. «Le doy el beneficio de la duda a un hombre de negocios que ha estado haciendo otras cosas, que quizás no ha concebido estas ideas y que de vez en cuando, podríamos verlo cambiar de opinión una vez éstas le hayan sido explicadas».
Para la preparación del evento, los organizadores solicitaron a los activistas de planta unas 50.000 preguntas. «Esta reunión va a representar no sólo a las 900 personas que asistirán sino a los cristianos de los Estados Unidos», explicó Moore. No se trata de una «inquisición» ni de una «coronación», sino de una «conversación», dijo Moore. «La campaña de Trump ha estado muy dispuesta en reunirse con estos líderes».
«Este es un grupo muy diverso y se compone principalmente de los pastores y otros líderes de iglesias», agregó. «No es una reunión de activistas políticos. Una parte importante de los cristianos más influyentes de Estados Unidos estará presente».
Carson convocará la reunión y pronunciará un discurso a los asistentes.
¿A dónde llegaremos cuando los líderes cristianos reciban más poder e influencia y se unan en temas importantes que a todos les interesen? Esto va a conducir a las demandas de una ley dominical y a la pérdida de la libertad religiosa para el pueblo de Dios. Difícilmente se puede uno imaginar a un adventista del séptimo día dando el discurso principal en una reunión como ésta.
«Cuando las iglesias principales de los Estados Unidos, uniéndose en puntos comunes de doctrina, influyan sobre el estado para que imponga los decretos y las instituciones de ellas, entonces la América protestante habrá formado una imagen de la jerarquía romana, y la inflicción de penas civiles contra los disidentes vendrá de por sí sola». El Conflicto de los Siglos, pág. 498.