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Un trabajador de una organización benéfica cristiana se enfrenta a una posible pena de cárcel y a una multa por hablar sobre su abandono del estilo de vida LGBT

Fox News, por Jon Brown: Un trabajador caritativo cristiano de Malta podría enfrentarse a penas de cárcel por afirmar que su fe le permitió abandonar un estilo de vida homosexual que ya no deseaba.

Matthew Grech, de 33 años, se enfrenta a posibles multas y penas de cárcel por haber infringido la prohibición de las «prácticas de conversión» cuando explicó a un medio de comunicación local el año pasado cómo dejó atrás la homosexualidad porque llegó a creer que era algo malo.

«Fui invitado por esta nueva plataforma emergente en Malta llamada PMnews para compartir mi historia y hablar de sexualidad en general», declaró Grech a Fox News Digital, señalando que se quedó «sorprendido» cuando la policía le llamó más tarde, un domingo por la mañana temprano, y finalmente le entregó una orden de la fiscalía citándole ante el tribunal el 3 de febrero.

El abogado de Grech sostiene que su caso es el primero de este tipo y amenaza con poner en marcha un «efecto dominó» jurídico que podría poner en peligro la libertad de expresión y la libertad religiosa en todo el mundo occidental.

Efecto dominó

Según una transcripción de su entrevista con PMnews Malta, en ningún momento Grech invitó a nadie a asistir a terapia para cambiar su orientación sexual o identidad de género, aunque se mostró crítico con la ley maltesa y explicó cómo llegó a creer que la homosexualidad no es una identidad, sino una práctica incompatible con su fe cristiana.

«Conocían mi postura sobre la homosexualidad y la sexualidad en general, así que querían saber un poco más sobre el tema, porque muchos rehúyen la otra cara de la historia», explicó Grech. «Pero estos chicos querían explorarlo porque están a favor de la libertad de expresión, y no les gusta que se acallen puntos de vista simplemente porque son impopulares».

Grech explicó que, después de que activistas LGBT vinculados al gobierno maltés y al Movimiento por los Derechos de los Gays de Malta (MGRM) lo denunciaran a la policía por la entrevista, ahora se enfrenta a multas de hasta 5.000 euros o a cinco meses de cárcel si es declarado culpable de violar el artículo 3 de la Ley de Afirmación de la Orientación Sexual, el Género y la Expresión de Género de Malta, que considera «ilegal que cualquier persona» «haga publicidad de prácticas de conversión». Los periodistas que le entrevistaron también tienen próximas citas con el tribunal y se enfrentan a posibles sanciones penales por su participación en la realización de la entrevista.

MGRM no respondió a la solicitud de comentarios de Fox News Digital en el momento de la publicación.

El MGRM no había respondido a la petición de Fox News Digital de hacer comentarios en el momento de la publicación.

Está previsto que Grech comparezca ante el Tribunal de Magistrados de La Valeta el 3 de febrero, donde será asistido en su defensa legal por el Christian Legal Centre (CLC), una organización sin ánimo de lucro con sede en Londres que se centra en casos de discriminación religiosa contra cristianos.

Andrea Williams, directora ejecutiva del CLC, declaró en un comunicado facilitado a Fox News Digital que el trato que las autoridades maltesas dispensan a Grech es discriminatorio y viola «sus libertades cristianas y su derecho fundamental a la libertad de expresión».

Los abogados de Grech tienen previsto argumentar que su procesamiento constituye una violación de su derecho a la libertad de expresión, garantizado tanto por la Constitución de Malta como por el Convenio Europeo de Derechos Humanos (CEDH).

«El efecto dominó de las prohibiciones de las ‘terapias de conversión’ comenzó en Malta», dijo Williams, quien advirtió que el caso amenaza con sentar un precedente que podría extenderse a otros países occidentales «a menos que se tomen medidas enérgicas».

Malta, una nación insular entre Sicilia y la costa del norte de África, fue el primer país de la Unión Europea en criminalizar las prácticas que buscaran «cambiar, reprimir o eliminar la orientación sexual, identidad de género y/o expresión de género de una persona.»

La legislación, aprobada por unanimidad en 2016, se asemeja a las prohibiciones de las terapias de conversión en todo el mundo, incluso en 20 estados y más de 100 municipios de Estados Unidos.

Muchas de estas prohibiciones en Estados Unidos se aplican solo a menores y contemplan exenciones para el asesoramiento religioso, aunque algunas en otros países prohíben a los adultos buscar ayuda de cualquier persona para tratar atracciones y comportamientos sexuales no deseados.

En Canadá, los terapeutas que ofrezcan cualquier tipo de asesoramiento para reprimir o reducir la «atracción o comportamiento sexual no heterosexual» o la «identidad no transexual» podrían enfrentarse a penas de hasta cinco años de cárcel, según una ley promulgada el año pasado que provocó las protestas de miles de iglesias de toda Norteamérica debido a su alcance.

El gobierno del Reino Unido, liderado por el Partido Conservador, anunció esta semana un plan para debatir legislación que añada la identidad transexual a la prohibición británica de la terapia de conversión, que antes sólo se aplicaba a la orientación sexual.

Naciones Unidas ha considerado que la terapia de conversión equivale a la tortura, y el Experto Independiente de la ONU sobre Orientación Sexual e Identidad de Género, Víctor Madrigal-Borloz, pidió su prohibición mundial en 2020.

Simplemente bárbárico

Durante una entrevista realizada en 2020, similar a la que condujo a su procesamiento, Grech recordó cómo su personalidad apacible y sus aficiones musicales de la infancia le convirtieron en un blanco al crecer entre otros chicos, que le acosaban y se burlaban de él por considerarle gay.

Dijo que asumía esa etiqueta como identidad y que llegó a mantener relaciones sexuales con otros hombres en un intento de encontrar la aceptación masculina, pero que empezó a desear un nuevo estilo de vida al convertirse al cristianismo.

Grech se involucró con la Federación Internacional para la Elección Terapéutica y de Asesoramiento (IFTCC), con sede en el Reino Unido, una organización cuyo objetivo es «promover un entorno afectuoso y sin prejuicios en el que las personas que deciden alejarse de sus sentimientos y comportamientos no deseados puedan encontrar el apoyo que buscan», según su sitio web.

También es fideicomisario de Core Issues Trust, un grupo que colabora estrechamente con la IFTCC y apoya a «hombres y mujeres con problemas homosexuales que buscan voluntariamente un cambio en su preferencia y expresión sexual».

Grech afirma que hay muchas otras personas como él que tienen «razones muy válidas» para tratar de alejarse de sentimientos sexuales no deseados, pero teme que estas personas se vean cada vez más marginadas y empujadas a la clandestinidad por los efectos de las prohibiciones excesivas de las terapias de conversión.

«Negar a las personas el acceso al apoyo espiritual o laico en cualquier contexto es una barbaridad», afirmó. «Es sencillamente una barbaridad».

Grech cree que los activistas que impulsan el tipo de aplicación de la prohibición de la terapia de conversión a la que se enfrenta «no sólo quieren prohibir la ayuda o el apoyo forzados, quieren prohibir nuestros puntos de vista por completo.»

«Quieren prohibir el asesoramiento cristiano en las iglesias simplemente porque no se ajusta a su religión», afirmó. «Afirman no ser religiosos, pero puedo decirles que son tan religiosos como los demás. Tienen un sistema de creencias, tienen una visión muy específica».

A pesar de su pequeño tamaño, Grech señaló que la cultura maltesa está considerada como «precursora» y «pionera» en Europa, y figura sistemáticamente en los primeros puestos de la lista de países más progresistas de ILGA-Europa.

La secretaria parlamentaria Rebecca Buttigieg anunció la semana pasada que Malta está reforzando su ley sobre terapia de conversión añadiendo una enmienda para redefinir la cláusula de publicidad «de modo que incluya la publicación, publicidad, exhibición, distribución, remisión y circulación de cualquier material que promueva la práctica», según el Times of Malta.

«Así que es preocupante que otros países sigan su ejemplo, pero tenemos que alertar a otras naciones y mostrarles cuál es la verdadera cara de una prohibición de las terapias de conversión», dijo Grech. «No es más que un punto de apoyo para que estos grupos de presión LGBT entren en las iglesias y consigan que los pastores y los ministros evangélicos se callen y se conformen, y simplemente no es sostenible».

El ídolo de nuestra generación

Grech señaló la ironía de que el primer caso de este tipo se diera en Malta, que ocupa un lugar destacado en la historia de su fe. La isla, una de las primeras colonias romanas que se convirtieron al cristianismo, aparece en el Nuevo Testamento como el lugar donde el apóstol Pablo naufragó y salió ileso de la mordedura de una serpiente venenosa que surgió de una hoguera.

Esa historia nos sigue hablando hasta hoy, porque cuando Pablo llegó a Malta, se encendió un fuego porque hacía frío, y una serpiente se le pegó al brazo», dijo Grech, refiriéndose a la historia de los Hechos 28. «Se la sacudió, le dijo que se la quitara de encima y le dijo que se la quitara». «Se la sacudió, le dijo dónde tenía que ir, y volvió al fuego».

«Al principio, la gente pensó que estaba siendo juzgado por los dioses porque aquella serpiente se le había enredado en el brazo, pero cuando vieron que no le pasaba nada, cambiaron de opinión», dijo.

Grech comparó la historia bíblica con su batalla legal y las luchas espirituales de personas que, como él, luchan por mantener su fe a pesar de sus sentimientos en medio de lo que considera una oposición cada vez más férrea por parte del gobierno y la cultura.

«Creo que mientras sobrevivimos a esta serpiente que intenta envenenarnos y hacernos daño, mientras miramos hacia Dios, que es capaz de salvarnos y redimirnos, la gente cambiará de perspectiva», afirmó.

«Creemos en lo mejor para nuestra nación, pero se ha erigido un ídolo, y es necesario derribarlo», añadió Grech. «Nos enfrentamos al ídolo de nuestra generación, y decimos: ‘No vamos a inclinarnos ante ti, cueste lo que cueste'».

Nuestro comentario:
¿Está rodeada hoy la casa legal de Lot?

Conexión Profética:
“Pero antes que se acostasen, rodearon la casa los hombres de la ciudad, los varones de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo.” Génesis 19:4.


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