La Cena anual de la Fundación Alfred E. Smith Memorial es un agasajo para recolectar fondos para las caridades católicas. Se lleva a cabo en el Hotel Waldorf Astoria y es organizada por la familia de Alfred E. Smith y el Cardenal católico de Nueva York. Este año, la lista de invitados a la cena anual número 71 incluyó los candidatos presidenciales Donald Trump y Hillary Clinton. Lo único que separaba a los dos rivales presidenciales era el cardenal Dolan con quien compartieron la comida y el escenario. Normalmente, los discursos de la cena son algo livianos y graciosos donde los participantes hacen bromas de sí mismos y del otro.
Sin embargo, Donald Trump atacó con duras críticas a Hillary Clinton y fue abucheado por el público. Aunque los medios de comunicación respondieron atacando a Trump, la iglesia católica aprovechó la oportunidad para codearse con los muy acaudalados asistentes. La cena Al Smith se remonta a 1945, cuando comenzó a celebrarse en honor al legado del primer candidato presidencial católico de la nación.
Las ácidas observaciones crearon mucha tensión en la cena pero el cardenal Dolan alivió la tensión y recordó a los ricos ejecutivos de Wall Street y otras personas influyentes la razón por la cual estaban congregados: estamos aquí para apoyar las caridades católicas y, en particular, a los niños que ellas ayudan.
Y a pesar de que la última versión de e-mails hackeados de la campaña de Clinton ha sufrido las acusaciones de que en el Partido Demócrata existe un profundo sesgo anti-católico, el cardenal Dolan logró recaudar un récord de seis millones de dólares para los niños necesitados. También la posición dudosa de Trump sobre el aborto tiene a los votantes católicos confundidos.
«Si hay una cosa molesta que ambos de este ciclo electoral han puesto de manifiesto, es que algo está muy mal con la forma de hacer política…», escribió Crux. «No obstante y a pesar de las circunstancias sombrías, el refrescante recordatorio de la noche anterior fue que incluso en medio de tal conflictividad, la iglesia católica todavía tiene la capacidad de unir a las personas, brindar esperanza y ofrecer una mejor forma de comprometernos con el mundo que nos rodea».
Dolan utilizó la aspereza entre los candidatos para sugerir que no necesariamente una campaña política sería la que pueda satisfacer las necesidades de los pobres, sino que será la iglesia.
«Y todo el mundo se maravilló en pos de…» Apocalipsis 13: 3.