LifeSite, por Paul Smeaton: El estado de Australia Occidental ha legislado para permitir que los agentes de policía u otros «oficiales autorizados» retengan a las personas y, si lo consideran necesario, les quiten por la fuerza la ropa interior para administrarles una vacuna.
LifeSiteNews se ha enterado recientemente de la legislación y está en comunicación con varios residentes de Australia Occidental que, hasta hace poco, desconocían los poderes extraordinarios que la ley estatal otorga al gobierno.
La llamada «fuerza razonable» incluye los poderes para:
a) aprehender y detener a la persona a la que se aplica la orden (la persona pertinente) y llevar a la persona a un lugar en el que se le exige que se someta a observación médica, examen médico o tratamiento médico o que se le vacune de acuerdo con la orden; y
b) Detener a la persona en cuestión en el lugar donde se le exige que se someta a observación médica, examen médico o tratamiento médico o que se le vacune de acuerdo con las instrucciones; y
c) para restringir a la persona en cuestión…
i) Para permitir la realización de una observación médica, un examen médico o un tratamiento médico; o
ii) Para permitir que la persona en cuestión sea vacunada;
d) Quitarse cualquier cosa (incluida la ropa interior) que la persona en cuestión lleve puesta, si…
i) Que la retirada de esa cosa sea razonablemente necesaria para permitir que se realice un examen médico o un tratamiento médico o, en su caso, para permitir que la persona sea vacunada; y
ii) Se da a la persona pertinente una oportunidad razonable de quitarse la cosa por sí misma, y se niega o no lo hace.
En el sitio web del gobierno de Australia Occidental que muestra las «Leyes Originales Aprobadas», en el texto se incluye la Ley de salud pública original de 2016. En el sitio web del Gobierno también se puede consultar una versión actualizada de la ley al 12 de septiembre de 2020, que incluye el mismo texto.
En junio de este año se publicó un artículo de «verificación de hechos» de la Corporación Australiana de Radiodifusión (ABC) sobre el tema, cuando algunos usuarios de los medios de comunicación social se enteraron por primera vez de la legislación y dieron la alarma on line.
En el artículo de la ABC se afirma que «estas facultades sólo son aplicables en caso de estado de emergencia en materia de salud pública, como se declaró en Australia Occidental el 23 de marzo de 2020, en respuesta a la pandemia de COVID-19».
El Dr. Rocco Loiacono, profesor titular de la Facultad de Derecho Curtin en Australia Occidental, dijo a LifeSiteNews que «no hay base para ninguna emergencia de salud pública ya que no ha habido ninguna transmisión comunitaria del virus en Australia Occidental desde principios de abril».
«El gobierno debería haber declarado la emergencia hace varios meses», dijo Loiacono, «pero por supuesto no renunciarán ahora a estos nuevos poderes».
El mes pasado, el primer ministro australiano Scott Morrison anunció que su gobierno había llegado a un acuerdo con la compañía farmacéutica británica AstraZeneca para suministrar a los australianos su vacuna contra el coronavirus de forma gratuita, siempre que la vacuna pase las pruebas clínicas.
Unas semanas después de la declaración de Morrison, los ensayos mundiales de la vacuna contra el coronavirus de AstraZeneca, que utiliza las células de un bebé abortado, se detuvieron temporalmente después de que un participante en el ensayo del Reino Unido se enfermara.
Poco después de anunciar el acuerdo con AstraZeneca, Morrison dijo primero que la vacuna contra el coronavirus se hará «tan obligatoria como sea posible» pero luego retrocedió un poco en los comentarios y dijo que la vacuna «no va a ser obligatoria» y que «no podemos retener a alguien y obligarlo a aplicársela».
Nuestro Comentario:
Esto nos da una idea de cómo será cuando haya que obedecer las leyes dominicales.
Conexión Profética:
“Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase. Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre.” Apocalipsis 13: 15-17.