Reuters: Más de 15 cohetes han alcanzado una base cerca de Bagdad que alberga soldados estadounidenses, según ha informado el ejército iraquí. Aún no está claro si el ataque a la base de Al-Taji ha causado alguna baja.
El miércoles, los cohetes Katyusha impactaron en al-Taji, situada a 27 km al norte de Bagdad, según informó el ejército iraquí. La base alberga fuerzas estadounidenses además de soldados iraquíes. Aunque los informes de bajas aún no se han confirmado, el portavoz de la coalición estadounidense, el coronel Myles Caggins, verificó en un tweet que más de 15 «cohetes pequeños» habían impactado en la base.
El ataque es el último de varios que han impactado en las instalaciones de EE.UU. y de la coalición en Irak en los últimos meses. Varios cohetes aterrizaron en Al-Taji y sus alrededores en enero, hiriendo a un miembro de las fuerzas de seguridad iraquíes, y la semana pasada se informó de que dos cohetes habían alcanzado la Zona Verde de Bagdad, activando las alarmas de la Embajada de los Estados Unidos.
Un video que circula en los medios sociales pretende mostrar los cohetes que se están lanzando. Ningún grupo se ha atribuido el mérito del ataque.
Mientras que Bagdad condena oficialmente los ataques, el parlamento iraquí aprobó una resolución no vinculante en enero pidiendo a todas las tropas extranjeras que abandonen el país tras el asesinato del general de división iraní Qassem Soleimani. La sugerencia ha sido ignorada incluso mientras la administración Trump sigue hablando de la «soberanía» iraquí.
El martes, el General de la Infantería de Marina de EE.UU., Kenneth McKenzie, dijo que el Pentágono está «en el proceso de llevar sistemas de defensa aérea» a «Irak en particular» para «protegernos contra otro posible ataque iraní.» El jefe del CENTCOM, hablando frente al Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, no mencionó si EE.UU. había obtenido el permiso de Bagdad para tal entrega, a pesar de que el Secretario de Defensa Mark Esper había admitido más de un mes antes que Washington todavía estaba esperando «el permiso del gobierno anfitrión» para trasladar baterías de misiles Patriot a Irak.
Los EE.UU. han citado los ataques de misiles de represalia de Irán sobre las bases de Al Asad y Erbil, que se produjeron en respuesta al asesinato de Soleimani por parte de la administración Trump, para justificar el fortalecimiento de las defensas aéreas, incluso cuando Bagdad ha dejado claro que Irak no está interesado en servir como campo de batalla para los dos países.
Conexión Profética:
“Y oiréis de guerras y rumores de guerras;…” Mateo 24:6.